Si
cada día tengo que soportar a «sesudos políticos» y «periodistas»
vomitar mentiras y estupideces -que no creen ni ellos- en medios de
comunicación públicos y privados supuestamente serios, yo me creo
con derecho a decir verdades, al menos mis verdades:
No
entiendo la postura de Sánchez, a no ser que le hayan ofrecido algo
grande por su quietud (léase cargo de importancia y bien remunerado
o algún acomodo de gran relevancia detrás de las puertas
giratorias). De otra forma no se entiende que un político joven, con
todo un futuro por delante se amilane de esta forma en una patética
teatralización de la política. El sabe que tiene los días contados
al frente del Psoe si no gobierna porque será irremediablemente
devorado en el foso de los cocodrilos (próximo
congreso socialista).
El miedo a que Podemos le robe la tostada de la izquierda no
justifica este inmovilismo escultórico e histórico del Psoe. La
pantomima de acuerdo con Ciudadanos no hizo más que desgastarlo -los
resultados cantan- por tanto no se comprende su postura ni la de los
barones. Ya en el pasado pactaron con los nacionalistas, cuando lo
tuvieron mayoría para gobernar, así que se hace de difícil
comprensión esta supuesta falta de cintura política, especialmente
si tenemos en cuenta los lejanos acuerdos del Congreso de Suresnes en
1974. A no ser claro, que las ataduras del viejo y prostituido
socialismo al Ibex 35 sean más fuertes de lo que aparentan. La
actitud tragicómica de Felipe González -líder de líderes-
pidiendo el apoyo para la investidura de Rajoy no hace más que
confirmar esta última hipótesis. Qué lástima!
Sánchez debe actuar ahora y pactar con la izquierda o morir engullido por su propia inoperancia. Lo de hablar con todas las fuerzas políticas que ahora dice pretender -incluido el PP- no es más que un nuevo acto del teatro al que nos tiene acostumbrados desde que tomó las riendas del Psoe.
Sánchez debe actuar ahora y pactar con la izquierda o morir engullido por su propia inoperancia. Lo de hablar con todas las fuerzas políticas que ahora dice pretender -incluido el PP- no es más que un nuevo acto del teatro al que nos tiene acostumbrados desde que tomó las riendas del Psoe.