La falta de interés sobre asuntos importantes, a los que apenas nos asomamos a diario, hace que con demasiada frecuencia acabemos dejando que otros piensen por nosotros y eso es algo muy peligroso.
Los grandes poderes económicos, detrás de los medios de comunicación, manejan con sus tentáculos las informaciones que deben llegar o no a los ciudadanos, también las que no interesa que lleguen e incluso las que deben llegar de forma parcial.
Todo esto hábilmente conjugado consigue que humildes y desconcertados trabajadores acaben postulándose en contra de partidos y personas que defienden sus intereses y a favor de los que nunca han hecho ni harán nada por los trabajadores, aunque en cada mensaje digan lo contrario.
"Perder" unos minutos en contrastar informaciones y mensajes nos acercarán a la verdad de nuestro futuro y el de nuestros hijos.
La información es poder, y hay muchos intereses en alejar la información real de los ciudadanos.
*Las fotos no tienen nada que ver con el texto -o si- pero me apetecía mucho incorporar imágenes de mi reciente visita a la "isla mágica" (Fuerteventura).