sábado, 1 de julio de 2017

No me consta España, por Paco Vega.

Indescriptible la repugnancia que produce la cara dura y arrogancia de unos señores que se lo han llevado calentito al tiempo que le engordaban la “caja negra” al partido, y que ahora se regodean por los platós o por el Congreso dando lecciones de dignidad. Gentes que deberían esconderse en el lugar más recóndito de la tierra su tuviesen un mínimo de vergüenza. Se sienten tan seguros, más allá de la pena que ya han cumplido, que sólo sueñan con disfrutar de la fortuna amasada, en cuanto escampe claro. Si tuviesen la más mínima duda de que su altanería puede agravar aún más su situación no andarían burlándose de todo y de todos. Si en este país la justicia fuese ciega en lugar de tuerta, no se presentarían con la sonrisa a medio dibujar con la que comparecen ante las cámaras.


Pareciera que no temen a nada ni nadie porque ya tienen lo suyo “bien amarrado”, por eso no temen enfrentarse a Comisiones de Investigación ni a periodistas, porque son maestros de la mentira. Es lo que han hecho durante toda su vida.

Se saben seguros bajo una montaña de secretos que implican A MUCHOS políticos de primera línea con mando en plaza...

Claro que después de lo sucedido con la Casa Real y con el “no me consta” de la Infanta, qué podíamos esperar.


Otros se han movido como pez en el agua por las cloacas malolientes de un estado putrefacto al que no sólo le huele los pies a franquismo. Condecorado y temido por todos ahora se convierte en un problema por la información delicada que acumula. Ahora se ha convertido en un problema que hay que eliminar… El perro viejo se lo huele y decide hacerse un seguro de vida dejando informaciones comprometidas a buen recaudo con contactos importantes y una aparición televisiva que deje en evidencia que si le pasa algo todo saldrá a la luz, con pelos y señales.

Ya produce repugnancia y cansancio hablar de esto porque es la desvergüenza nacional. A este país hay que darle la vuelta como a un calcetín o no veremos nunca la luz. Demasiada desvergüenza, demasiada impunidad para los de siempre.


Sin embargo a muchos lo que realmente les molesta es que se hable de ello, que se señale a “los suyos”.

Gran país, grandes patriotas.

España, una grande y … podrida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario