domingo, 30 de agosto de 2015

Crónica de un indulto excesivamente anunciado

Si vas a construir ilegalmente,
procura hacer hoteles o mansiones,
porque por dos o tres habitaciones
la ley irá a por ti implacablemente.
Si vas a delinquir, hazte influyente;
si lo haces, sé pez gordo entre los chicos,
porque si no te harán la vida añicos
y te encarcelarán sueños y penas,
pues son para los pobres las condenas
y los indultos son para los ricos.

Los versos son de Yeray Rodríguez. Les cuento el final al principio: finalmente el pescadito chico y flaco fue indultado. Pero el perdón a sus pecados no fue gratuito. El día que la iban a indultar Josefa Hernández se levantó a las 7 de la mañana. Miró a un lado, miró a otro y no vio a sus nietos ni a sus hijos. Tampoco estaba en su isla. Josefa Hernández, la denominada “abuela de Fuerteventura”, estaba en la cárcel de Tahíche. Que el indulto iba a llegar este viernes 28 de agosto en el Consejo de Ministros ya lo sabía Josefa. Fíjense que lo sabemos nosotros hoy jueves, un día antes. Y no, no somos adivinos. Lo habían cacareado, lo habían anunciado, lo habían patrocinado, lo habían coreado los que indultan a los ricos a escondidas, los que permiten hoteles ilegales donde luego se alojan y los mismos que no suspendieron su ingreso en prisión las dos veces que lo solicitó la Fiscalía, el pasado 6 de julio y el sábado 22 de agosto. Cuando toda Canarias era un clamor, cuando el día anterior habían salido personas de todas las islas a la calle a pedir la libertad de Josefa, cuando la “abuela de Fuerteventura” había ingresado ya en prisión, es cuando le conceden el indulto. Un oportunismo debidamente estudiado. Josefa Hernández se sentó en la cama y recordó el calvario de la última semana y pico. “Solo quiero vivir en paz con mi familia”, pensará, “da igual tirar abajo la casa que tanto esfuerzo me costó construir si tengo otra donde vivir con mi familia”.

jueves, 27 de agosto de 2015

EL MOBBING EN EL TRABAJO

MOBBING (tema de interés)

(Art. 173.1 del Código Penal)

Sólo quien ha sido víctima directa de este tipo de acoso o ha conocido a algún familiar o amigo que haya pasado por las mismas circunstancias pueden conocer de primera mano el tormento provocado, muchas veces desde la supuesta “impunidad” del agresor.

El acoso laboral o acoso moral en el trabajo, conocido comúnmente a través del término inglés mobbing: ‘asediar’, ‘acosar’, ‘acorralar en grupo’, es tanto la acción de un hostigador u hostigadores conducente a producir miedo, terror,desprecio o desánimo en el trabajador afectado hacia su trabajo, como el efecto o la enfermedad que produce en el trabajador. Esta persona o grupo de personas reciben una violencia psicológica injustificada a través de actos negativos y hostiles dentro o fuera del trabajo por parte de grupos sociales externos, de sus compañeros ("acoso horizontal", entre iguales), de sus subalternos (en sentido vertical ascendente) o de sus superiores (en sentido vertical descendente, también llamado bossing, del inglés boss, jefe). Dicha violencia psicológica se produce de forma sistemática y recurrente durante un tiempo prolongado, a lo largo de semanas, meses e incluso años, y a la misma en ocasiones se añaden "accidentes fortuitos" y hasta agresiones físicas, en los casos más graves. Una situación de acoso muy prolongada en el tiempo, además de enfermedades o problemas psicológicos, puede desembocar, en situaciones extremas, en el suicidiode la víctima.
Lo que se pretende en último término con este hostigamiento, intimidación o perturbación (o normalmente la conjugación de todas ellas) es el abandono del trabajo por parte de la víctima —o víctimas—, la cual es considerada por sus agresores como una molestia o amenaza para sus intereses personales (necesidad de extorsión, ambición de poder, de riquezas, posición social, mantenimiento del statu quo, etc.)
El término mobbing (del verbo inglés to mob, con el significado antes aludido) proviene de la etología, ciencia que estudia el comportamiento de los animales, sobre todo del campo de la ornitología, donde la conducta defensiva de un grupo de pequeños pájaros consiste en el atosigamiento continuado a un enemigo más grande, con frecuencia un ave rapaz. Estos comportamientos en la naturaleza terminan frecuentemente, o bien con la huida, o con la muerte del animal acosado por varios otros.
El científico sueco Heinz Leymann investigó el fenómeno en la década de 1980, y fue quien utilizó por primera vez el término mobbing para referirse al problema. Otros autores destacados en el estudio del acoso moral y del mobbing son la francesa Marie-France Hirigoyen y el español Iñaki Piñuel y Zabala.
La incidencia poblacional del acoso laboral se calcula que se encuentra entre el 10 y el 15% del total de los trabajadores en activo.

martes, 11 de agosto de 2015

LA BANDERA TRICOLOR, por Paco Vega

La Ley Orgánica 10/1982, de 10 de agosto, de Estatuto de Autonomía de Canarias, recoge la oficialidad de la bandera canaria (la del escudo y los canes), pero de todos es sabido que el pueblo canario con la que se siente mayoritariamente identificado -cada vez más- es con la de las siete estrellas verdes.

Recuerdo que en mis lejanos años de adolescencia y juventud en los que cantábamos en las verbenas y bailes aquello de “Me gusta la bandera, me gusta la bandera, ay, mamá, bandera tricolor. Con siete estrellas verdes, con siete estrellas verdes, ...” Hablamos de finales de los 70 y comienzos de los 80, con el dictador muerto y enterrado, y con una democracia incipiente de la mano de una transición muy controlada, en la que ya cantábamos y revindicábamos nuestra bandera, con la que realmente nos sentíamos identificados los canarios. Sin embargo, por aquello de la vinculación de Antonio Cubillo y el MPAIAC en la creación de aquella bandera que data de 1964, las desconfiadas mentes del extinto régimen e incipiente autonomía estimaron que era mucho mejor crear una nueva bandera en lugar de la de las siete estrellas, intentando “atar los machos” de un posible resurgir independentista canario.