jueves, 10 de enero de 2019

Víctimas de la desinformación y del pasotismo


El problema de tomar prestadas las opiniones de la extrema derecha es que luego hay que defenderlas en los foros, y por consiguiente RETRATARSE PÚBLICAMENTE... Y aquí se está retratando mucha gente para la que todo vale con tal de que los suyos alcancen el poder, mezclando churras con merinas, mezclando democracia y libertad con UNA, GRANDE Y LIBRE… Y no, no todo vale…

En esto de la política algunos olvidan que es más importante «el qué» que «el con quién». La peligrosidad de la extrema derecha no es quién lleva en las listas -muchos de ellos formados en las filas del PP con una larga trayectoria política- sino sus propuestas antidemocráticas y que nos retrotraen a una España en blanco y negro preconstitucional. Llama la atención que los que se hacen llamar «constitucionalistas», se suban encima y la pisoteen la constitución a la menor oportunidad, especialmente si lo que está en juego es el poder.

La negociación con C's, quien no hay que olvidar ha sostenido al Gobierno de Susana Díaz los últimos cuatro años, puede ser criticable políticamente -según el criterio de cada uno- pero la negociación con la extrema derecha de VOX, con una serie de medidas que rozan más rancio del fascismo y que nos retrotraen a tiempos pretéritos, en los que la LIBERTAD y la DEMOCRACIA, de la que ellos tanto presumen era sólo una entelequia, nos da la medida de lo frágil de esta democracia.


Creo que hay mucha gente perdida en este contubernio político llamado España. Los grandes medios de comunicación, intoxicando, manipulando y mintiendo han tenido parte de culpa. De los partidos ni hablamos, que mienten más que hablan y ni tuercen el gesto. Pero también son culpables los ciudadanos que entienden la política como si de un equipo de fútbol se tratara, defendiendo sus colores “manquepierda...”, sin pararse a pensar que no sólo está en juego nuestro presente y nuestro futuro, sino también el de nuestros hijos. Eso y la falta de memoria para recordar promesas y mensajes nunca cumplidos (léase autónomos, que campaña tras campaña “se les promete hasta el meter, para ver como después del meter nada de lo prometido...”). Pero vuelven con la matraca una y otra vez porque les funciona, oiga, ya lo creo que les funciona.

Ahora llega la extrema derecha de los que conocen todos los mecanismos de agitación del ciudadano medio, de su falta de información, de su hartazgo y lo utilizan para manipularle. Previamente han abonado el terreno (las redes sociales y los medios de la caverna) para que la plantación fascista germine. Señalar al enemigo exterior como el culpable de todas nuestras desgracias es de los mecanismos más simplistas nunca conocidos, pero funciona, ya lo creo que funciona. Las mentiras que llevan años circulando por las redes sobre el trabajo que nos roban, la delincuencia, las ayudas y una larga lista de mentiras que no soportan el más mínimo test de veracidad, pero ya saben ellos que el que “traga” no verifica, prefiere tragar e irse al fútbol o a los toros… En realidad se vierten mentiras para encefalogramas planos, pero se las compran…

No les ha importado siquiera poner en riesgo la vida de miles de mujeres acosadas por el maltrato machista. Ellos llevan años viendo determinados tics y perfiles machistas en nuestra sociedad y no han dudado tampoco en utilizarlos. En cualquier país democrático y sensato los correrían a gorrazos sólo por esta insinuación de culpabilizar a las víctimas de la violencia machista, esta lacra que tantas muertes y desgracias ha ocasionado en este país. Pero ellos aprovechan todo lo que pueda significar arañar un voto, aunque sea lo más criminal y vomitivo de la sociedad. Eso o que padecen un machismo misógino enfermizo y que nunca en sus familias o entorno cercano han conocido una víctima de violencia machista, que nunca han conocido las estadísticas oficiales de mujeres maltratadas (no sólo las muertas) y por eso se tragan las mentiras machirulas Vox y el sometimiento a las mujeres.

Ahora sigan viendo fútbol y votando fascismo. Luego sólo quedará llorar por nuestra torpeza, por nuestro desinterés, por nuestra cobardía… Siempre nos quedarán las lágrimas para el desahogo cuando ya no haya remedio.

Cada día me sorprendo en las redes sociales con personas supuestamente preparadas y formadas que caen en los engaños y las redes simplistas de los fascistas. Me tiro manos a la cabeza pero sucede cada día. Demasiada información tóxica para asimilar, para destripar. Preferimos comulgar con piedras de molino si estas vienen ya precocinadas convenientemente por los neandertales de la extrema derecha. ¿Cuándo vamos a reaccionar? ¿Cuándo le toque a nuestra hija, hermana, madre…? La ingenuidad y pasividad de esta sociedad es BRUTAL.

Les recuerdo: Hitler llegó al poder democráticamente. Lo demás ya lo conocen… Franco llegó mediante un golpe de estado. Lo demás ya lo conocen ¿O no…?








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