martes, 15 de julio de 2014

LA POLÍTICA CANARIA PARA LOS CANARIOS, por Paco Vega.

Canarias necesita un Gobierno potente, serio, que defienda Canarias y a los canarios de las tropelías coloniales petrolíferas que quieren imponernos desde Madrid en beneficio de Repsol. Necesitamos también un Gobierno Insular fuerte, serio, que defienda los intereses de esta isla de Gran Canaria y de sus habitantes sin entrar en el manido pleito insular, que incitan cada vez que quieren distraer la atención de los asuntos importantes, y para el que no dudan en malgastar dinero público a través de campañas pleitistas (divide y vencerás).

Mientras tiran el dinero público de todos los grancanarios en este tipo de campañas frentistas hacen oídos sordos a la tropelía petrolíferas que quiere cometerse en nuestra tierra. El de Gran Canaria es el único Cabildo -gobernado por el Partido Popular- que no ha denunciado las prospecciones petrolíferas, más bien al contrario. Mientras tanto desatienden y amenazan con cerrar el Consorcio Insular de Bomberos de Gran Canaria, una herramienta vital de prevención y extinción en esta isla. Por lo visto ya nadie se acuerda de los lamentables incendios que arrasaron el sur de Gran Canaria en el 2007. La prevención, formación y dotación es la herramienta fundamental para evitar que se repitan estos lamentables hechos. Lo contrario es rozar la temeridad y jugar con la seguridad de los grancanarios.

lunes, 7 de julio de 2014

REGENERACIÓN Y CORRUPCIÓN, por Antonio Morales Méndez

Tras las últimas elecciones europeas, el bipartidismo español, noqueado por los resultados, se ha sometido a un lifting apresurado. Pretende, con un estiramiento de piel superficial, hacernos creer que promueve modificaciones profundas para la regeneración de la democracia. Pero todo suena a más de lo mismo. No hay catarsis, se trata de puro maquillaje. En pocas semanas se suceden, precipitadamente, la abdicación del rey, la dimisión de Rubalcaba y anuncios, por parte de Mariano Rajoy, de cambios y transformaciones económicas y sociales que no conducen a nada. Pronuncia en vano la palabra regeneración pervirtiéndola hasta el hastío. Provoca una agitación en la superficie pero los lodos siguen instalados en el fondo. Apuntala el estatus actual y nos intenta vender que esos cambios son la solución a los problemas que vivimos. Y nada más lejos de la realidad.

La primera medida del gobierno del PP, que anunciaba beneficios fiscales para el común de los ciudadanos, pronto se desvela como un artificio más que castiga a las clases medias y permite salir de rositas a las élites, que mantienen sus prebendas y sus evasiones fiscales. Y vuelve a la carga. Abriendo el mes de julio, Cospedal y Rajoy insisten en el uso de la cosmética y nos anuncian un paquete de nuevas medidas. Hablan ahora de la elaboración de una agenda para la “mejora democrática” y proponen la elección de alcaldes de manera directa (lo que les beneficia sobre todo a ellos, ya que evitarían las coaliciones de izquierda), la disminución de diputados y ayuntamientos y la reducción de los aforados (80% son fiscales y jueces), unos días después de colar de manera urgente y “singular” el aforamiento de Juan Carlos, Sofía y la Princesa de Asturias. Y ni una mención a la democratización de los partidos políticos y las instituciones, la transparencia, la independencia del Parlamento y de la Justicia… Y ni una palabra sobre la corrupción.