jueves, 8 de septiembre de 2016

LA POLÍTICA EN DOS BROCHAZOS, por Paco Vega.

Si cada día tengo que soportar a «sesudos políticos» y «periodistas» vomitar mentiras y estupideces -que no creen ni ellos- en medios de comunicación públicos y privados supuestamente serios, yo me creo con derecho a decir verdades, al menos mis verdades:
No entiendo la postura de Sánchez, a no ser que le hayan ofrecido algo grande por su quietud (léase cargo de importancia y bien remunerado o algún acomodo de gran relevancia detrás de las puertas giratorias). De otra forma no se entiende que un político joven, con todo un futuro por delante se amilane de esta forma en una patética teatralización de la política. El sabe que tiene los días contados al frente del Psoe si no gobierna porque será irremediablemente devorado en el foso de los cocodrilos (próximo congreso socialista). El miedo a que Podemos le robe la tostada de la izquierda no justifica este inmovilismo escultórico e histórico del Psoe. La pantomima de acuerdo con Ciudadanos no hizo más que desgastarlo -los resultados cantan- por tanto no se comprende su postura ni la de los barones. Ya en el pasado pactaron con los nacionalistas, cuando lo tuvieron mayoría para gobernar, así que se hace de difícil comprensión esta supuesta falta de cintura política, especialmente si tenemos en cuenta los lejanos acuerdos del Congreso de Suresnes en 1974. A no ser claro, que las ataduras del viejo y prostituido socialismo al Ibex 35 sean más fuertes de lo que aparentan. La actitud tragicómica de Felipe González -líder de líderes- pidiendo el apoyo para la investidura de Rajoy no hace más que confirmar esta última hipótesis. Qué lástima!
Sánchez debe actuar ahora y pactar con la izquierda o morir engullido por su propia inoperancia. Lo de hablar con todas las fuerzas políticas que ahora dice pretender -incluido el PP- no es más que un nuevo acto del teatro al que nos tiene acostumbrados desde que tomó las riendas del Psoe.