martes, 8 de abril de 2025

El riesgo de opinar, por Paco Vega

 



El riesgo de opinar, por Paco Vega

Salvando las distancias con el título del libro “El riesgo de opinar. Apuestas por la izquierda”, del profesor y político José Antonio Pérez Tapias (de quien “tengo el honor” de haber sido bloqueado en redes sociales), coincido en que el riesgo de opinar está precisamente en la exposición pública de nuestra visión de los problemas comunes o las políticas públicas, pero principalmente en la posibilidad de verse uno atrapado en su propio desmentido, como le ha sucedido a este que les habla en más de una ocasión, o simplemente quedar expuesto a la refutación de otros.

Por tal motivo es fácil ver en redes sociales a mucho intelectual de salón y pijama que, apenas mete la puntita, es decir -y que nadie me malinterprete- que realiza pequeños comentarios, normalmente ambiguos o irónicos -aunque sobrados de arrogancia- sobre los más variados temas; sin entrar nunca en la profundidad de los asuntos y por tanto a la exposición pública o a la posible refutación antes mencionada. Otros se dedican a mantener encendidos debates políticos cuasi privados en muros ajenos, mientras mantienen el propio blanco e impoluto de falsa neutralidad. Toda postura es respetable, faltaría más, aunque reconozco que la de la arrogancia vacua de algunos me supera, seguramente por las razones antes expuestas.

De acuerdo con el consultorio ético de la Fundación García Márquez, “la opinión se ha convertido en una lucha casi desesperada, no sólo para sobrevivir, sino por conservar un margen suficiente de libertad que nos permita mantener movilizada y crítica a una sociedad a la cual se le pretende liquidar el derecho a estar informada”. Al hilo de esto último, quiero destacar lo difícil que es escapar a la manipulación masiva de los grandes prebostes de la comunicación.

No hace mucho me preguntaron el por qué de la exposición pública con mis artículos de opinión a cambio de nada, es decir, sin nada que ganar y mucho que perder… Sinceramente no supe qué responder, porque pensar que sólo merece la pena arriesgar cuando hay algo personal que ganar es realmente descorazonador. Aún reconociendo que soy un “marciano”, soy plenamente consciente de que mis reflexiones portan una gran dosis de ingenuidad, pero muy mal le iría al mundo si todos nos moviésemos única y exclusivamente por interés personal. Para creer en unas políticas públicas volcadas en lo común, en el más amplio sentido de la palabra, y no en favor los grandes monstruos de la economía capitalista, hay que tener cierta dosis de ingenuidad, es cierto, pero me gusta pensar que no todo está perdido. Es lo único que nos queda antes de entrar en una sociedad tremendamente cainita, donde cada uno va a lo suyo con egoísmo depredador.

No siempre he sido tan “temerario”, pero la experiencia, los años y las lecturas, te van armando de “anclajes docentes” (permítanme el atrevimiento), que lógicamente no tenía en mi lejana juventud. Ya entrado en los sesenta me permito ciertas libertades, especialmente al constatar el penoso nivel de los que campan por sus respetos al frente de las Administraciones Públicas canarias.

Y no es que los problemas sean de difícil solución, pero son asuntos que, por alguna extraña razón se eternizan, como los atascos de cada día en la carretera del Sur de Gran Canaria, por poner sólo un ejemplo. La fragilidad de nuestro archipiélago cobra una especial dimensión por el patente abandono en el que se encuentra. Cada problema cobra una dimensión especial por ser Canarias un territorio fragmentado y limitado, muy alejado de la capital administrativa del Estado. Fuera de Canarias realmente no importamos a nadie. Hay mil ejemplos que lo demuestran, pero actualmente lo estamos viviendo con el asunto de los menores inmigrantes no acompañados. Cuando trescientos mil ucranianos no tuvieron problemas para acomodarse por todas las comunidades autónomas, también en Canarias, a donde vinieron nueve mil. Ahora, por racismo y aporofobia las mismas Comunidades Autónomas, miran para otro lado y dicen “a otro perro con ese hueso”… Hasta el Gobierno de España podría haber hecho algo más, como ha hecho con los ucranianos, pero para Canarias todo son pegas…

Ahora los nuevos nacionalismos dicen que quieren estar en Madrid. ¿Para qué…? O acaso no los hemos tenido por años y de nada ha servido. Los canarios, nacionalistas o no, se ven obligados a elegir entre el sillón y Canarias. Y eligen siempre lo primero. En fin, que me voy del tema...

El hecho de que la mediocridad sea tan abundante entre la clase política, como la mala hierba, es motivo suficiente para que los que tenemos algo que decir lo expongamos al escrutinio público, sin recato.

Si tuviésemos una clase política de nivel, los escribidores de andar por casa no tendríamos la temeridad y el riesgo de opinar.



viernes, 28 de marzo de 2025

Canarias y su mediocre clase política, por Paco Vega

 



Canarias y su mediocre clase política, por Paco Vega

Canarias se desangra mientras su mediocre clase política juega a ver “quien la tiene más grande”…

Al día siguiente de las últimas elecciones generales de julio de 2023, este que les habla escribía un pequeño texto que acabó siendo premonitorio de la vida política canaria, especialmente en todo lo concerniente al entorno denominado canarista.

Titulaba y decía entonces que,


2023-07-24-Peligra el Gobierno de Nueva Canarias en Guía, por Paco Vega.

Nueva Canarias debe realizar un análisis sereno o puede perderlo todo en poco tiempo.

Llama la atención en unos dirigentes tremendamente hábiles en política. Estarán perdiendo facultades…

Después de perder su participación en el Gobierno Canario, de sacar el Cabildo de Gran Canaria por los pelos y Guía por los pelos, teniendo que pactar con el PSOE. Llegan ahora las generales y pierden su representación en el Congreso. Antonio Morales va como pollo sin cabeza haciendo concesiones a las eléctricas y destrozando la isla de Gran Canaria por su empecinamiento en defender lo indefendible. Ayer se vieron los resultados, por si las autonómicas e insulares no hubiesen bastado para evidenciarlo.

La derecha política está a un paso de tomar “al asalto” el Ayuntamiento de Guía. Después de la unión de Ahora Guía con Coalición Canaria para estas generales, podemos decir que la derecha en Guía tiene 8 concejales (3 de Unidos por Gran Canaria, 3 de Coalición Canaria 2+1 y 2 del PP), mientras que “el progresismo” tiene 9 (7 de Nueva Canarias y 2 del PSOE). La pasada legislatura Nueva Canarias sacó 9 (mayoría absoluta), pero se le marchó una concejala a la oposición y se quedaron en minoría, lo que les obligó a pactar con PSOE (que tenía 2), por lo que recuperaron la mayoría de gobierno con 10. Ahora el Grupo de Gobierno vuelve a tener 9, pero en un pacto de gobierno con el PSOE (7+2), con una mayoría mucho más “quebradiza”. Esto no sería un problema de no ser por su actual alcalde y peculiar “impronta”. No hay más ciego que el que no quiere ver.

Hasta en la baraja no basta con tener las mejores cartas, también hay que saber jugarlas, y en Guía pueden perder la partida con todos los ases en la manga por ir de sobrados.

No es opinión, son datos objetivos.


Finalmente en Guía perdieron la partida, tras la Moción de Censura del pasado septiembre de 2024, aunque sigo teniendo mis dudas sobre el actual pacto de gobierno por lo errático de su comportamiento, con el socialista Alfredo Goncalves a la cabeza, más preocupado por su imagen personal que de mostrar capacidad resolutiva y de gestión sobre los asuntos municipales. Sólo se ha puesto “los galones” para expulsar del Grupo de Gobierno a su propio Teniente de Alcalde… ¡Qué cosas!...

El ínclito Pedro Rodríguez por su parte, con 14 años al frente del Ayuntamiento de Guía, pasó de representar a la derechona nacionalista de Coalición Canaria -hace ahora diez años- para hacerlo con los llamados progresistas Nueva Canarias, a través de su marca blanca de Juntos por Guía, a imitación de Teo en Gáldar... Ahora vuelve a traicionar a los suyos, también con Teo, para cambiarse a un nuevo partido del que a día de hoy no conocemos ni el nombre. Pero eso es lo de menos. Da igual el nombre y hasta la ideología (si es que la tienen), si les permite seguir medrando de lo público. Llama la atención también el que TODOS los concejales de estos partidos -al unísono- accedieran al cambio de chaqueta sin protestar, ni antes ni ahora. Coherencia política de primer nivel... Municipalismo lo llama ahora el de Gáldar, como si eso fuese una ideología y la luz que alumbra a todas las ubres políticas. Y se queda tan tranquilo entre los aplausos de los que nunca cuestionan ni una coma. Pero ya conocen ustedes aquello de que “el que se mueve no sale en la foto”… Pues eso, que la política canaria baja enteros a pasos agigantados, entre carnavales, romerías y fiestas de todo tipo, que de eso si que saben...

No sé si se habrán percatado los miembros de este nuevo conglomerado político que, aunque Oscar Hernández puntualizara estos días que funcionarán como una federación de partidos, se van a inscribir como PARTIDO ÚNICO, curándose así en salud para que nadie les haga lo mismo que ellos están haciendo ahora, marcharse con viento fresco cuando pensaron que seguir aferrados a lo público consistía en demostrar su habilidad para cambiar de chaqueta, sin más consideración. En la misma publicación se dice que el partido nace con vocación regional, pero se cuidan mucho de pisarle la manguera al amigo chicharrero (y futuro socio), hasta el punto que titubean para no solaparse con los congresos de Coalición Canaria. También con el de Nueva Canarias, que aunque ya han dicho que no van a participar, una cosa es pisar un callo y otra muy diferente hacer sangre, si de mantenerse aferrado a los sillones se trata…

Y así hasta que Dios quiera… (o la próxima contienda electoral).

Yo creo que lo decente y hasta lo democrático es “mandarse a mudar si ya no te sientes identificado con el partido por el que pediste el voto a tus vecinos, voto por el que tienes el cargo y las prebendas actuales. Y así, desde la oposición, te alías con quien tu quieras y formas los partidos o coaliciones que estimas oportunas. Lo contrario es muy feo, porque querer soplar y sorber al mismo tiempo es de tramposos.

Y yo que pensaba que mi “bola mágica” estaba perdiendo la wifi, y miren ustedes por donde…

Nueva Canarias está a punto de perderlo todo a no ser que se saque un conejo de la chistera a última hora. Y es que no sé cómo no lo vieron venir… Lo de sumar votos a costa de lo que sea y con quien sea tiene sus consecuencias y acaba pagándose muy caro…

Aviso para navegantes…


martes, 25 de marzo de 2025

“Los patriotas” quieren acabar con el Estado, por Paco Vega

 



Los patriotas” quieren acabar con el Estado, por Paco Vega

Es llamativo comprobar como “los patriotas” se empeñan en minimizar, empequeñecer, desactivar, adelgazar o desaparecer el Estado tal y cómo lo conocemos. Los de golpes de pecho, la bandera en ristre y mano en alto, son los que menos creen en el Estado, salvo para obtener las suculentas subvenciones que les brinda. A estas nunca renuncian. Sólo quieren al Estado para ordeñarlo, aunque siempre señalarán la paja en el ojo ajeno, ignorando la viga en el propio.

¿Recuerdan ustedes el rescate a la banca, que decía Rajoy que no iba a costar ni un euro a los españoles, pero que luego acabamos pagando todos los ciudadanos a base de recortes de salarios, pensiones y servicios públicos? Pues agárrense, porque ahora viene “el guapo” para hacer lo propio con la dichosa guerra de Ucrania, en la que parece que los líderes europeos, incluido el español, quieren jugar a borrarnos del mapa. Al menos ya sabemos quien va a pagar esta locura bélica, los que sobrevivan para contarlo, claro...

Todo el amplio abanico de derechas y extremas derechas -nacionales o autonómicas- se han empeñado en hacer desaparecer LO PÚBLICO. También las izquierdas de cartón-piedra. La gestión de los asuntos principales, llamados a preservar el interés general de los ciudadanos, es objeto de codicia por parte del gran capital.

Desde que el dictador pasara a mejor vida, se protegió el enriquecimiento de las grandes fortunas de este país, como condición sine qua non para la pervivencia del nuevo régimen, a base de la privatización de todo lo público.Los alfiles” del bipartidismo español, beneficiarios luego de las famosas puertas giratorias, han sido punta de lanza para el citado adelgazamiento del Estado, al tiempo que las grandes fortunas engrosaban sus ya de por si abultadas alforjas.

Tras el consumado pacto de la “venerada transición” (o entramado político-empresarial con barniz de democracia), se cimentaron las bases del nuevo RÉGIMEN (este si que es un régimen y no Venezuela). Fue precisamente Felipe González y los suyos los que encabezaron este destrozo de todo lo público. Si, González, el mismo que deja en evidencia a su partido cada vez que abre al boca ante un micro indiscreto, dejando por “mansos” a la derecha más rancia. Quien nos iba a decir entonces que, el citado González y el deslenguado de Alfonso Guerra, “adalides” entonces de “la democracia y la modernidad española”, no eran más que unos “fachas travestidos” a los que, entonces como ahora, los medios de comunicación blanquearon convenientemente. Los medios, siempre los medios como ingrediente fundamental de todas las salsas de este RÉGIMEN. Luego ya siguieron el Aznar del dedo acusador y bigote a lo Groucho y el resto del bipartidismo patrio, con el camino ya despejado para hacer tabla rasa de las empresas públicas más rentables del Estado, con idéntica complicidad mediática.

Al tiempo que el Gobierno Central, con “muletilla” o sin ella, sigue implementando normas para beneficiar al gran capital, las CC.A.A., Cabildos y Ayuntamientos hacen lo propio, cada uno a su nivel. Los sectores privatizados (o externalizados -como les gusta matizar- aunque lo hagan por cuarenta años), aumentan tras cada legislatura. Y ahí están “los buitres” al acecho, esperando para hacerse con su suculenta presa, gobierne quien gobierne. Esas privatizaciones y la multitud de empresas que viven de las subvenciones públicas si que son PAGUITAS, y no los bulos racistas referidos a la inmigración.

Las privatizaciones se han demostrado nefastas para el desempeño de los Servicios Públicos, que a partir de ese momento ha de generar suculentos beneficios para la empresa adjudicataria, por encima del interés general de los citados servicios. La indisimulada falta de control público de estos sectores privatizados, vienen a implementar la redondez del negocio para unos y el deterioro del servicio para otros. Cuando los destinatarios del servicio son personas vulnerables, el daño se convierte en ABANDONO...

Lamentablemente no es de LO PÚBLICO de lo que están preocupados nuestros políticos, que les suele importar más bien poco, a la vista de los resultados, sino de los intereses de estas empresas amigas, muchas de ellas donantes de sus partidos y campañas electorales, que lógicamente, una vez pasadas las elecciones, vienen a cobrar lo suyo

Los patriotas” quieren dinamitar el Estado, sólo por egoísmo, mientras que sus seguidores lo hacen por pura ignorancia.



martes, 11 de marzo de 2025

2025-03-11-Como náufragos en un archipiélago, por Paco Vega

 



Como náufragos en un archipiélago, por Paco Vega

Los canarios, inducidos por los medios de comunicación o abducidos por una indolencia crónica, estamos generalmente ocupados por lo que pasa en la España peninsular, mientras Canarias languidece mortecina.

Los canarios nos sentimos como náufragos, gritando y gesticulando para hacernos ver y oír, mientras la “nave Hispania” navega allá a lo lejos, indiferente a nuestros lamentos. Incluso observamos a algunos canarios que, formando parte ocasional de aquella tripulación, nos miran con desdén desde la distancia. Quizás sea el momento de tomar conciencia, de asimilar de una buena vez que, la solución a los problemas de Canarias no vendrá nunca desde fuera... Tenemos que cambiar y dejar de mendigar migajas de atención.

Es el momento de reflexionar sobre nuestras propias potencialidades como pueblo, así como tomar conciencia de que juntos podemos sacar a Canarias del bloqueo en el que se encuentra.

En este pueblo canario hay gente muy valiosa, que está deseando sumar y remar en la buena dirección. Debemos escucharlos y dejarnos aconsejar por los que quieren lo mejor para Canarias y los canarios.

Quizás éste sea el momento de tomar conciencia de que somos nosotros los que debemos tomar las riendas de nuestro destino, exigiendo políticas serias en beneficio del interés general de los Canarios; políticas de creación de empleo, de conservación de nuestro territorio, de nuestra Sanidad y Educación, así como el fortalecimiento de todo nuestro sector productivo. Y exigir que, el dinero que se genere Canarias se quede en Canarias.

Nuestros representantes públicos deben tener una altura política que no vemos en nuestras instituciones; la mediocridad, la mentira y la corrupción inundan nuestros Gobiernos.

Los canarios debemos olvidarnos del papel de náufrago, porque nadie vendrá a rescatarnos. Debemos ponernos a la tarea de trabajar por estas islas en la que tenemos la fortuna de vivir. Estoy convencido de que si dejamos de pedir auxilio y nos ponemos a trabajar por Canarias nos irá mucho mejor.

Nadie mejor que nosotros para saber lo que nos conviene…

*Esto escribía el que les habla en agosto de 2013, cuando las preocupaciones por los problemas de Canarias hacía ya mucho tiempo que se habían convertido en certezas. Doce años después, los citados problemas no han hecho más que acrecentarse.

Siempre “pintaron bastos” para Canarias, pero los canarios miraron hacia fuera, esperando a que fueran otros los que les salvaran. Miraron y siguen mirando hacia fuera porque les enseñaron que no eran dueños de su destino, incluso desde el propio sistema educativo. Les dijeron que serían otros los que vendrían a ocuparse de lo nuestro. También los medios de comunicación, como no; tienen su parte alícuota de responsabilidad.

Al canario en general se le ha inculcado que es menor de edad, que no puede decidir por si mismo.

Nuestra clase política pareciera que, como cualquier colonia que se precie, sólo atiende al poderoso D. Dinero. Al resto nos dan fiestas, carnaval y papagüevos, para que estemos entretenidos y no pensemos, que pensar es malo para la estabilidad del sistema...

A nuestra clase política le cuesta bien poco “cambiar de disfraz” y subirse a sus plataformas de mediocridad para seguir contando mentiras.

No podemos permitirnos más ensayos porque nos va el futuro en ello. Si votamos ROBO y ABANDONO no podemos esperar SALVACIÓN y RESPETO.

Los náufragos canarios” debemos apagar la hoguera y arriar la bandera de auxilio. Es vital comprender que, la salvación de Canarias está en nuestras manos, sólo en nuestra manos.