sábado, 21 de enero de 2023

Mi decepción con las renovables, por Paco Vega

 



Siempre estuve a favor de las renovables, y lo sigo estando. Cómo no estar a favor de la eliminación de las emisiones de CO2 a la atmósfera, cómo no estar a favor de acabar con todo tipo de energía que destruye cuando se extrae y vuelve a destruir cuando se consume. Si hay variadas formas de producir la energía sin contaminar ni verter emisiones de ningún tipo, qué motivo habría para no avanzar en esta senda civilizadora y de conservación de nuestro territorio.

Hace años, comprobando como iba llenándose nuestras ínsulas de molinos de viento, me hacía la ilusión (ingenuo que es uno) de que algún día dejaríamos de ver esas grandes chimeneas humeantes de nuestras monstruosas centrales térmicas. Al mismo tiempo confiaba en que las diversas administraciones públicas tutelasen esas grandes aspas movidas por los alisios, consiguiendo así un precio asequible de la energía, al tiempo que ingresaba valiosos euros con los que acometer otros servicios, tan necesarios para la mejora y la calidad de vida de los maltratados canarios.

Sin embargo, a medida que iba avanzando en el conocimiento de la trama eólica, comprobaba con tristeza que este asunto no era más que otro turbio negocio que ya empezó con “el paso torcido” (no sé si recuerdan el famoso “caso eólico” que tutelara desde el Gobierno Canario el hermanísimo de un famoso ministro canario de infausto recuerdo, especialmente por sus múltiples fechorías e impuestos solares). Posteriormente hemos podido comprobar que son contados los parque eólicos públicos, mientras que los impulsados por la oligarquía canaria y otros poderes económicos han inundado nuestros paisajes de suculentos negocios molineros -especialmente en el sureste grancanario- que ya duele a la vista su sola contemplación. El conocimiento de que el sistema proyectado va a convivir con los monstruos humeantes clama al cielo y a la desesperación de cualquier persona con un mínimo de sensibilidad medioambiental.

El famoso y polémico proyecto Chira-Soria, con el que estuve de acuerdo en sus planteamientos iniciales, se ha tornado en un autentico atropello medioambiental de incierto beneficio público y asegurado beneficio especulativo, que tampoco servirá para eliminar las dichosas chimeneas. Es decir, que al final lo que podría haber sido un beneficioso proyecto energético para Gran Canaria, se ha convertido en otro pestilente asunto, al tiempo que atentado medioambiental.

Por si la inundación de molinos quijotescos y chimeneas no fuese suficiente, observamos con espanto la sustitución de grandes extensiones de tomateros por paneles solares, también privados, para acrecentar el negociete de unos pocos y la desesperación de la mayoría que nunca imaginamos que “el cambio” iba a ser este.

A esta decepción con las renovables se le une otra de signo político respecto del Presidente del Cabildo de Gran Canaria, al que que he aplaudido públicamente, especialmente en su etapa como alcalde de Agüimes y al frente de la Mancomunidad del Sureste de Gran Canaria, en la que considero realizó un meritorio trabajo. Posteriormente, desde sus comienzos al frente del Cabildo, las decepciones han venido encadenadas y no sólo por el tema energético. Siempre confié en que Antonio Morales sería “la esperanza blanca” de esta maltratada tierra… Ya ven, las mayores decepciones llegan de quien, después de haberle “regalado letras” te las devuelven con “desvíos, toques pa’trás, o traspiés”…

De los demás imagínense lo que puedo esperar...

Qué si creo en las renovables? Por supuesto. Es la única opción para este planeta. Es la única alternativa para este terruño archipielágico.



martes, 17 de enero de 2023

Gracias, Manolo. Gracias, maestro

 Cuando tenía 16 o 17 años, un grupo de cómicos se daban la vez para asomarse a través de la televisión a nuestros hogares y hacer reír a los espectadores. A finales de los Ochenta o tal vez inicios de los Noventa, escuchaba las carcajadas de mi padre, que siempre ha tenido una risa muy contagiosa, al escucharlos, especialmente a uno de ellos.

 

-Mira Mar, este es uno de los mejores cómicos del programa. Escúchale, es buenísimo. Creo que es canario…

 

Esa fue la primera vez que vi a Manolo Vieira. Alto, delgado y con un brillo de inteligente ironía en la mirada que le ha acompañado siempre. Me encantó. Desde el minuto uno me cautivó su manera de contar las cosas porque tal vez esa es su gran baza, su capacidad de narrar y atraparte en la historia, como quien no quiere la cosa. Le di la razón a mi padre. Después, ambos, yo ya tan fan como él, lo escuchábamos en Protagonistas de Luis del Olmo, como a todos los grandes humoristas del momento. Siendo uno más, sino el mejor.

 

Yo ni siquiera podía pensar entonces, que unos años más tarde me iría a vivir a Canarias y que allí iba a establecer mi vida. No se me podía ocurrir que me iba a casar con un lanzaroteño y que algunos de mis mejores amigos serían isleños. Y mucho menos me podía imaginar que Carmelito, Maruquita, Fefa, Cuco y Chanín iban a acabar siendo viejos conocidos.  Y ta y cuá, pun pun, esto y lo otro, frases bien familiares.

 

He tenido la suerte de entrevistarle en este número, con ocasión de su despedida de los escenarios, que no del todo porque a sus 73 años sigue estando hecho un chaval en lo que a rapidez de reflejos se refiere, y no deja de intercalar algún que otro chiste entre respuesta y respuesta. Se puede sacar al artista de los escenarios, pero nunca dejará de serlo.

 

Dicen que los sabores, como la Magdalena de Proust, te transportan al pasado, a los recuerdos. Y los olores, y la música también lo hacen. A mí los chistes de Manolo Vieira, o más bien sus monólogos (en esto ya fue todo un precursor, un auténtico pionero) me transportan a esas jornadas de risas compartidas con mi padre, a mis 16 años, cuando todo estaba por llegar. Justo por eso, cada vez que lo veo, antes incluso de que empiece a contar historias, a mí ya se me ha dibujado una sonrisa en la cara y un enorme respeto por alguien que lleva toda su vida haciendo sonreír a los demás. No se me ocurre nada más importante. Justo por eso, no puedo hacer otra cosa que darle las gracias. Gracias, gracias por ser la banda sonora de nuestras vidas, por hacernos más soportables los malos ratos y permitirnos creer que, a pesar de que lo estemos pasando mal en un momento concreto de nuestras vidas, siempre volverán los momentos de risas y alegrías. Por todo eso, gracias, maestro.

Mar Arias Couce 

lancelotdigital

https://www.lancelotdigital.com/articulos/gracias-manolo-gracias-maestro?fbclid=IwAR3GrqeImp7DHOz3wqFzy0mk4mNBqQ4zOoEQQ9NfOXWh0XAuMpgEBbM5ij4


miércoles, 28 de diciembre de 2022

La manipulación política existe, no es una inocentada, por Paco Vega

 


Si no ves la manipulación de los medios es sencillamente porque estás abducido por ellos, porque la prensa, la radio y la televisión están sobradas de manipulación, especialmente los informativos, que ya es decir…

Estoy de acuerdo en que mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, han conseguido grandes logros y conquistas, pero no podemos ignorar el poder de los grandes emporios económicos, que no dudan en “regar” de millones de euros a medios y periodistas para que actúen como mercenarios de sus intereses. En realidad les sale mucho más barato invertir en manipulación política que en campañas de publicidad. Lo vemos cada día. Incluso los medios que son habitualmente tildados de izquierda tienen determinados programas, tertulias o periodistas que emiten opiniones claramente de derechas. En más de una ocasión me he sorprendido revisando el dial -por si se me había movido accidentalmente- desconcertado por los mensajes emitidos por una emisora supuestamente progresista. Lo mismo ocurre con La Sexta en televisión, con fama de izquierdas, lo que resulta casi simpático de no ser por la gravedad del asunto, puesto que sus dueños son los mismos que Antena3 (con una marcada escora a “estribor”). Y es que lo bueno del “masoquismo” de aficionarse a ver debates políticos en televisión es que sabes perfectamente qué y quién dijo qué cosas; quiénes articulan un discurso coherente y quiénes lanzan consignas vacías de contenido. Y claro, cuando ves el debate periodístico -posterior al debate parlamentario- te quedas con la boca abierta al comprobar que lo dicho por determinados periodistas o tertulianos no tiene nada que ver con el contenido del debate anterior, lo mismo sucede con los informativos, en el conocimiento de que la inmensa mayoría de ciudadanos no han visto el debate parlamentario.

Y si a esto le añadimos la nada despreciable manipulación de las redes sociales y sus sicarios, que manejan miles de cuentas falsas y se meten en todos los debates que huelan a política para retorcer el criterio de los ciudadanos poco informados, tenemos la tormenta perfecta…

La política para pobres, vista desde la derecha, es muy tosca: todo está basado en el pretérito “orgullo patrio” la bandera y cuatro mensajes trasnochados y caducos referidos a la unidad de la patria. En definitiva, intenta convencernos de que somos seres superiores por una simple cuestión accidental como es la racial o geográfica; por haber nacido en estas coordenadas geográficas y tener un determinado color de piel. En definitiva, mensajes cortos y sencillos; y miedo, mucho miedo, sobre todo a eso de que vienen los rojos, los negros o los moros... Por no decir que esto de la raza o la nacionalidad no es más que un mensaje prostituido desde su origen, puesto que todos sabemos que en realidad es cuestión de dinero; el color de piel y la nacionalidad caen a un segundo, tercer o cuarto lugar si la cartera del individuo en cuestión está bien abultada.

Qué poco hemos avanzado desde la penosa dictadura, aunque la realidad es que nunca salimos de ella. Los mensajes coherentes y sustentados de políticas verdaderas no apelan al miedo sino a la esperanza. Las derechas en cambio apelan al falso orgullo patrio. Por eso es tan fácil tocar el corazón de los desinformados con gestas deportivas u otro tipo de acontecimientos que nada tiene que ver con los problemas reales para llegar a fin de mes de la mayor parte de trabajadores y pensionistas. Se les aleja intencionadamente a una realidad paralela en la que puedan sentirse parte de un todo que no les pertenece. Y sobretodo que puedan olvidarse de los problemas reales ocasionados por una política que les maltrata y que tiene como objetivo final favorecer a las clases adineradas.

La política desde la izquierda es más compleja: hay que profundizar mucho en el origen de los problemas y conocer muy bien el funcionamiento de un estado corrupto en el que siempre han mandado los mismos, y a las pruebas me remito (el maremoto originado por la decisión del Tribunal Constitucional de impedir su trabajo al Legislativo), que pocas veces ganan el pulso las políticas que favorecen a los trabajadores. Lo estamos viendo cada día. Cuesta “Dios y ayuda” torcer el brazo a los grandes poderes económicos, a sus representantes políticos y judiciales, así como a los partidos que se disfrazan de izquierda para timar al confiado ciudadano. Explicar el poder e influencia de los lobbies económicos locales y estatales no es fácil. Los que dirigen y toman las decisiones no dan nunca la cara, se esconden tras sociedades interpuestas del más variado pelaje. En fin, que los mensajes de la izquierda están enfocados a favorecer a la gran mayoría de trabajadores y pensionistas pero cuesta mucho hacerles llegar el mensaje en esta selva de mentiras abonadas con dinero.

Por otra parte comprobamos que, gran parte de los ciudadanos tampoco están por la labor de conocer las políticas adecuadas para su futuro y el de sus hijos. La inmediatez, el ombliguismo y el egoísmo del “ande yo caliente y ríase la gente” marca muchas veces la deriva política.

Y la pregunta del millón: ¿Cómo es posible que si los ricos son pocos y los trabajadores muchos, no ganen siempre las propuestas que prometen elevar el bienestar de los trabajadores…? Pues ahí está la clave, en LA MANIPULACIÓN MEDIÁTICA para convencer a los trabajadores de que la opción de las derechas es la buena, aunque luego comprueban cada legislatura que todo es mentira, que siempre ganan los mismos, los poderosos; pero esa es otra variable, que la memoria es frágil y vuelven a repetir los errores porque el bombardeo mediático es brutal. Bombardeo del que es muy difícil abstraerse, que no siempre es igual y además tiene sus fases perfectamente planificadas; unas veces con mentiras (sobre intenciones propias o ajenas) y otras con silencios. Si, los silencios también son manipuladores en demasiadas ocasiones.

Y si, desgraciadamente los medios de comunicación, alimentados con dinero de los grandes poderes económicos, tuercen el voto de los ciudadanos a través de la manipulación. Créanlo, no es una inocentada.


domingo, 18 de diciembre de 2022

Jueces contra la democracia | #EnLaFrontera635

Escuchen a Juan Carlos Monedero en una de sus clases magistrales. A Monedero hay que escucharlo varias veces porque dice tanto en tan poco que es muy difícil captar todo el mensaje de una sola vez.


sábado, 17 de diciembre de 2022

Inauguración de la remodelación de la Plaza de La Atalaya

 La conexión del agua de abasto público mediante la instalación de estos pilares supuso un avance extraordinario para la mejora de la salubridad y calidad de vida de los vecinos de La Atalaya.

Hoy se recupera el emblemático pilar instalado en esta Plaza en las primeras décadas del siglo XX, en lo que pretende ser un homenaje a los mayores del barrio que tantas dificultades padecieron durante su infancia y juventud.

La Atalaya, 15 de diciembre de 2022



                                               



En la inauguración de la remodelación de la Plaza de La Atalaya con mi amigo Angel Ramos Padrón, además de Concejal de Hacienda, Patrimonio, Transparencia, Nuevas Tecnologías, Compras y Parque Móvil. En la misma actuación se pudo recuperar, después de muchos años, el antiguo pilar ubicado en esta plaza. Gracias a Pedro, Ángel y a todo el Grupo de Gobierno por hacerlo posible.


Salir de la cárcel, por Paco Vega

 



Lleva más de media vida en prisión. Nada grave, todo delitos menores que fueron conformando una montaña de penas y toda una vida entre rejas...

Siento una rabia e impotencia inexplicable cuando pienso lo que pudo haber sido su vida en libertad. Y no es que intente justificar sus delitos y errores pero no puedo evitar que me venga a la mente la impunidad de otros, los delitos cometidos por esos tipos estirados de cuello y corbata que se saben a salvo de la policía y las togas, personajes que no lo necesitaban pero que por una ambición desmedida no les importa acaparar fortuna sin límites, al precio que sea, poniendo en juego la vida y la libertad de otros con muchas menos oportunidades. La mezquindad humana no conoce límites y es especialmente cruel con los menos favorecidos.
Ahora está a punto de salir en libertad, por lo que pronto le verán deambular desconfiado y desubicado, en un entorno que ha cambiado mucho en su ausencia y en el que le costará desenvolverse con normalidad. Él intentará disimular y mostrarse “normal”, que está integrado, pero no lo está. Son muchos años fuera de circulación. La vuelta a la normalidad para cualquier persona que haya estado privado de libertad durante muchos años no debe ser fácil.
Esta sociedad tiene una asignatura pendiente con los ex-presos y su recuperación para la sociedad. Es eso o permitir que vuelvan a recaer una y otra vez en la delincuencia, quien sabe si causando algún daño superior. La vuelta a las “viejas amistades” y a la drogadicción es el primer paso de los que no encuentran su lugar en esta sociedad deshumanizada y egoísta.
No, no está todo perdido, hay muchas salidas, pero debería haber un camino de acompañamiento ya trazado. Les hemos visto otra veces. Piden a gritos una oportunidad de normalizar su vida, aunque no abran la boca ni pronuncien palabra, aunque fuercen una sonrisa de inseguridad cada vez que se tropiecen en la calle con un viejo conocido.

Otro modelo de Sanidad Pública es posible.

Tardar más de 2 semanas en ver a tu médica de cabecera, 5 meses en ver a tu especialista y más de 6 meses en operarte es la consecuencia del modelo de privatización de salud canario del que solo se benefician unos pocos.

Otro MODELO es posible.



 

lunes, 5 de diciembre de 2022

El caminar se demuestra andando, por Paco Vega

 

Que el caminar se demuestra andando es una frase que llevo a gala desde hace ya muchos años, ya avanzados los cuarenta -nunca es tarde para iniciarse- en que decidí enfundarme “el mono reivindicativo” y de opinador público; primero durante dos años desde la Asociación Vecinal La Piconera, con más ruido que resultados prácticos, y a continuación desde mi blog personal “El rincón de Maestro Pancho” -desde hace 12 años-, en redes sociales, en medios de comunicación digitales, en emisoras de radio, alguna aparición esporádica en televisiones locales y finalmente con la publicación de mi libro “Reflexiones al borde de un café”, además de sendas colaboraciones en los libros “100 escritos a Padrón” y “Señales del Alba”.

El espíritu reivindicativo no sólo quedó agazapado detrás de un teclado de ordenador, sino que también incluye la participación activa en diversas manifestaciones y concentraciones durante más de una década. Mi impenitente curiosidad también me llevó a la participación en numerosos seminarios, cursos y congresos de todo tipo a lo largo y ancho de nuestra isla, lo que me llevó a conocer a valiosas personas con similares inquietudes, así como coincidir -en ocasiones- con algunos ediles municipales.

No tengo registro gráfico de todas mis participaciones en los eventos anteriormente citados, puesto que nunca ha sido el objeto de las mismas, pero aquí les muestro unas pocas que he podido recopilar a modo de muestra.

¿Qué por qué lo cuento ahora? Pues sinceramente no lo sé. Quizás no me había parado a pensarlo nunca. Son muchas las cosas que hago por convencimiento personal, sin esperar nada a cambio, sin pensarlo. Quizás con el íntimo convencimiento de que, el andar se demuestra andando… Y nada más… Será que me estoy haciendo mayor y cada vez más tiende uno a mirar por el retrovisor de la vida…























domingo, 4 de diciembre de 2022

La amistad, por Paco Vega.



Debemos intentar ser mejores personas cada día, yo al menos así lo entiendo, aunque no siempre me salga bien. Procuro manejarme por la vida sin herir a nadie por mis acciones, palabras o silencios. Si, los silencios también dañan, a veces inconscientemente. Por lo tanto pido perdón por mis silencios.
Las palabras creo que las controlo mejor, aunque no siempre. A veces me veo en situaciones comprometidas e incómodas, situaciones de deslealtad de las que deseo salir con urgencia para no herir a nadie con una reacción inapropiada. Quiero simplemente seguir con mi vida y alejarme de aquellos que ya no están cómodos con mi presencia. A veces pasa, es normal. Una amiga me decía en estos días que mi problema es que me entrego demasiado… Y si, tiene razón. No sé dosificarme (ni quiero porque entonces no sería yo…), y esto puede llegar a ser un problema. Siempre voy de frente, con tacto y sin herir, pero de frente. Y esto no siempre es bien recibido, especialmente por los que son conscientes de que no pueden entregar el mismo compromiso. No es culpa mía, pero a veces sucede.
Celebro los logros y victorias de mis amigos como si fueran mías. Soy feliz junto a la gente feliz, aunque sólo sea por un momento. No es ingenuidad, es simplemente lealtad. También sé que no todo el mundo es así, pero no entiendo de otra forma la amistad, será otra cosa pero no AMISTAD (con mayúsculas). La amistad debe ser sincera y plena. Si no para qué…
Es como el amor en las relaciones de pareja, si no lo entregas todo ¿para quién te estás reservando...? Aunque luego el golpe sea tremendo. Pues eso...
Los abrazos amigos multiplican las alegrías, mientras que tener un hombro amigo en el que llorar una pena es como una balsa salvavidas en este mar de la indiferencia. Sólo así entiendo yo la amistad. Sólo así entiendo yo la vida…
Por lo tanto pido perdón por mis silencios, por mis palabras y por mi apasionamiento. Perdón por ser tan humano como imperfecto…

domingo, 20 de noviembre de 2022

Dos más dos “casi siempre” son cuatro

 


A muchos ciudadanos les cuesta leer y contrastar “la información” que les vomitan a la cara los medios de comunicación. La mayoría son fieles seguidores a sus medios afines, a los que consideran “de confianza”, tragando plenamente sus “noticias” y comentarios sin percatarse de las manipulación a la que son habitualmente sometidos. Estos medios, en su inmensa mayoría, son propiedad de las grandes fortunas, muy vinculadas -como es lógico- la derecha política. Es un circuito de retroalimentación mutua. También las redes sociales, casi más eficaces que los medios, son utilizadas para “retorcer” la verdad.

¿Cómo describir la situación y que todo el mundo lo entienda?

Los ricos son pocos, pero necesitan los votos de los trabajadores que son mayoría pero que, abducidos por sus medios de comunicación, les hacen creer que sus políticas les van a beneficiar, al margen de otras arengas patrióticas vinculadas especialmente a los sentimientos de pertenencia, raza o nación, que no a una correcta gestión de los recursos públicos. Los grandes poderes económicos manejan el 90% de los medios de comunicación, que a su vez están escorados mayoritariamente a la derecha, con los que bombardean tarde, mañana y noche a los desnortados ciudadanos. Incluso hay medios creados ex profeso para “parecer de izquierdas”, con igual o mayor efectividad manipuladora pero con una conducta algo más serpenteante.

A la derecha extrema y a la extrema derecha les importa un pimiento -por ser “agrocorrecto”- lo que ocurra con los trabajadores y autónomos, clases media o baja. Ellos están ahí para defender a los ricos y grandes fortunas, que nadie se equivoque. Si tu no eres rico ni poderoso no figuras en su agenda, olvídate de que sus políticas te beneficien lo más mínimo, por muchas banderas y arengas patrióticas que enarbolen. Pero claro, algún “hueso” tienen que echarle al perro para que menee el rabo de vez en cuando...

El PP se estaba desmoronando debido a su corrupción descarada, a pesar del sostén y la cobertura mediática de la prensa, radio y TV; que en un constante trabajo de blanqueo han conseguido frenar el descalabro. De todas formas, alguien decidió crear Vox por si las moscas, para así ir recogiendo los votos que al PP se le iban cayendo por la derecha, debido a que no todos los votantes están dispuestos a tragar con ruedas de molino. Esta extrema derecha descarada viene a eso, a abducir a los desencantados y a los desinformados, que viven pendientes del fútbol en exclusividad, además de otras distracciones. Vienen a simplificar a la complicada política con cuatro banderas y arengas patrióticas, como si las banderas se comiesen. Vox es la extrema derecha pura y dura, sin complejos, fascistas de toda la vida. Son un apéndice desgajado del PP, antes Alianza Popular y un poco antes el franquismo (una de las dictaduras más crueles y despiadadas que ha existido en el mundo).

Franco y su fascismo cruel nació cuando los ricos y poderosos se dieron cuenta de que la esclavitud y la explotación laboral se iba a terminar, con la victoria del Frente Popular en febrero de 1.936 por mayoría absoluta, lo que produciría una merma en sus millonarios ingresos, que no pérdidas, pero ya se sabe que la esclavitud es muy rentable. El analfabetismo -cultural o político- fue siempre el gran aliado de la derecha más rancia y en esa línea siguen trabajando.

A la derecha no le interesa la escuela pública porque con la privada consigue dos cosas: que la educación y el conocimiento esté lo más lejos posible de los trabajadores, al tiempo que explotan el jugoso negocio de la educación privada. A la derecha tampoco le interesa la sanidad pública, casi por los mismos motivos: por no alargar en exceso la vida de los pensionistas pobres y por tanto ese “gasto inútil” para el Estado, como son las pensiones; y por el mismo motivo que el razonamiento anterior, por explotar los abultados beneficios de la sanidad privada. Las pensiones privadas son otra derivada de esta cuadratura del círculo.

Los impuestos, ahora tan de moda, por eliminar Andalucía los impuestos a los ricos (el de patrimonio), al igual que había hecho con anterioridad Madrid, son otro caldo de cultivo de la derecha. Los ricos apenas pagan impuestos, mientras el grueso de los ingresos del Estado vienen por la vía de las nóminas de los trabajadores y de los impuestos indirectos (impuestos al consumo -IVA o IGIC- que pagamos todos a escote, ricos y pobres). Esto es así lo mires por donde lo mires, pero ya están ahí los manipuladores medios de comunicación para hacerte ver que lo blanco es negro, un día si y el otro también.

Hace muchos años que abrí los ojos tras unas propuestas electorales del Sr. Aznar -al que no voté- que lanzaba soflamas de reducción de impuestos para “todos los ciudadanos”. La conclusión -para no cansarles- es que pasado el periodo electoral y habiendo sido elegido el susodicho como presidente del Gobierno, pude comprobar en mi nómina una considerable subida de impuestos a través del IRPF, justo en sentido contrario de lo que publicitaban en campaña. Eso si, los que si sufrieron una sustanciosa reducción fueron las rentas más altas, al haber variado los tramos del citado impuesto, bajándoselos a las más altas y subiéndoselos a las más bajas. Este y no otro es “el truco del almendruco” que llevan explotando desde siempre. Todo un marasmo de mentiras y manipulación, porque la derecha a quien mima y cuida es a las grandes fortunas, que para eso los han puesto ahí.


Un picoleto valiente y majorero de adopción

 


A mediados del año 1999, llegó a la isla de Fuerteventura un grupo de guardias civiles con la importante misión de poner en marcha el Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil, una Unidad de nueva creación en Canarias. El fenómeno migratorio iba en constante aumento por aquel entonces, por lo que se les encomendó la delicada misión de conformar, poner operativa y sacar el máximo partido a una unidad marítima de nueva creación. Así que, con más voluntad que medios humanos y materiales, se les encomendó a la ardua tarea de hacer frente a la avalancha migratoria de pateras que llegaban a las costas de Fuerteventura y Lanzarote. Las primeras semanas fueron muy agónicas, con pocos efectivos, sin patrulleras, con unas modestas oficinas cedidas por el Ayuntamiento de La Oliva en la localidad de Corralejo, sin apenas mobiliario ni equipos informáticos. Hubo que improvisar patrullas terrestres con vehículos prestados de otras unidades territoriales del Cuerpo, así como embarcar al personal en helicóptero del Cuerpo y pesqueros que amablemente se prestaron a colaborar cuando se recibía el aviso de la llegada de alguna patera. Tampoco había radares en tierra que avisaran con la antelación suficiente la llegada de dichas embarcaciones. El panorama no podía ser más desolador. Sin embargo, con mucho trabajo y voluntad se fueron minorando -que no supliendo- las carencias materiales, de personal y operativas.

Posteriormente llegó la primera Patrullera, cedida por el Servicio Marítimo Provincial de Murcia, con bastante antigüedad, horas de motor y problemas técnicos, era de las primeras que se pusieron en servicio en territorio peninsular. Así que coordinando voluntades y mucho trabajo de mecánicos, marineros, patrones, así como del personal de oficina, se fue encajando el complicado puzle operativo a marchas forzadas.

Fueron varios los oficiales comisionados que se fueron sucediendo durante meses en el mando, mientras se iba configurando la Unidad. A comienzos del año 2000, el joven Teniente D. Jorge Fajardo Velasco (27 años) fue destinado al mando de la citada Unidad, todo ello en medio de la avalancha migratoria que no paraba, exigencias de resultados por parte de la superioridad, críticas de los medios de comunicación y la propia población de las islas afectadas -Fuerteventura y Lanzarote- que permanecía atónita ante el masivo fenómeno migratorio.

En el Puerto Corralejo los mecánicos trabajaban a marchas forzadas por poner en óptimas condiciones de navegabilidad aquella desvencijada patrullera, mientras en la oficina el veterano Brigada Romero hacía encaje de bolillos, en base a su dilatada experiencia, tanto con el nombramiento de los servicios, petición de material y equipos, contacto con los organismos competentes, etc., necesarios todos para poner en marcha la Unidad. Tanto el Oficial como el Suboficial se dividían la multitud de gestiones y trámites a realizar, así como la coordinación del personal de oficina y operativo. Cada día se enfrentaban a nuevos desafíos operativos, organizativos o de material.



Por fin, cuando se pudo poner en navegación a la vieja patrullera, hubo que pelear con otra selva de nuevos problemas como los puntos de repostaje, revisiones, averías, así como lugares de adquisición del material diario de mantenimiento. También la dotación y puesta en servicio del imprescindible pañol mecánico. Posteriormente, en noviembre del mismo año, llegaron dos Patrulleras de nueva adquisición, con lo que también aumentaron las exigencias de resultados y las necesidades logísticas.

El trabajo en aquella época no daba tregua. Las desgracias y primeros ahogamientos de inmigrantes no tardaron en llegar, por vuelco de pateras próximas a la costa o en el momento del rescate, lo que no hizo sino aumentar la tensión de las tripulaciones, de los medios de comunicación y la de los propios mandos del Cuerpo a todos los niveles que, como es lógico, querían tener puntual información de todas las incidencias de los hechos acaecidos, así como del trabajo diario. Las investigaciones, tanto interna como judiciales, ante la posible exigencia de responsabilidad también estuvo presente. Se trataba de vidas humanas y todos los miembros de la Unidad eran plenamente conscientes de la responsabilidad.

En resumen, podemos decir que, poner en marcha una Unidad Operativa Marítima de nueva creación, con tremendas exigencias humanas y de servicio, con las carencias antes detalladas no está al alcance de todos. Toda una enorme responsabilidad que se sustentaba sobre las espaldas de aquel joven Oficial. Esa fue sin duda una prueba de fuego a la que no todos los mandos del Cuerpo se han visto sometidos en los inicios de su carrera profesional. Solamente los que formaron parte de aquella Unidad embrionaria de lo que es hoy el Servicio Marítimo Provincial de Las Palmas, conocieron del duro trabajo espartano que significó aquellos primeros años de andadura marítima en Canarias.

Y como lo que no se cuenta no se sabe, a veces hay que echar la vista atrás y recordar sólo algunas pinceladas de lo que significó la puesta en servicio de aquella brillante Unidad que salvó miles de vidas humanas. Las frágiles pateras de madera que llegaban a las islas de Fuerteventura y Lanzarote lo hacían al borde de la navegabilidad, próximas al hundimiento. Los inmigrantes, que a buen seguro iniciaban su arriesgado viaje con la esperanza de alcanzar un mundo mejor para ellos y los suyos, terminaban deseando el rescate de una de nuestras patrulleras como única esperanza de salvar sus vidas. Hay que recordar que en aquella época, al contrario de lo que sucede hoy en día, sólo estaban implicadas en el rescate de inmigrantes las citadas patrulleras de la Guardia Civil, puesto que sería años después cuando las embarcaciones de Salvamento Marítimo, pertenecientes a la Dirección General de Marina Mercante, se incorporaron a estas tareas de rescate.

Aquel joven Teniente de entonces es -a día de hoy- Teniente Coronel en la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva. Un hombre que compaginó su demostrada capacidad de trabajo y valentía con una humildad y sencillez exquisita, a pesar de la responsabilidad y las duras vicisitudes que le tocó vivir durante aquellos años en tierras majoreras.

Vaya desde aquí mi humilde homenaje para este malagueño de nacimiento y majorero adopción.