La
agarrada se presentaba desequilibrada en favor del contrario desde el
principio. Ellos plantaron rivales muy fuertes en el terrero, de los
que no aflojan hasta el final. Los había poderosos, cuya sola
presencia intimidaba, presagiando que el esfuerzo para derrotarlos
debía ser titánico. Los había también hábiles, escurridizos y
correosos, de los que no te puedes fiar hasta que no los tienes en la
arena.
Nosotros
tampoco éramos mancos, máxime con los refuerzos llegados del
exterior, que nos empujaban a no cejar en el empeño y nos hacían
albergar esperanzas, pero la superioridad del rival era más que
evidente. Nunca antes una agarrada se presentó tan desigual para
nosotros.
La
combatividad y rapidez de los primeros embates nos anunciaban una
agarrada histórica. Las pechadas se sucedieron con desigual
resultado, cuando conseguíamos llevar a la arena a alguno de los
contrarios, ellos doblegaban a dos de los nuestros. Incluso alguno,
cuando ya parecía caído, conseguía revolverse y llevar a la arena
al nuestro. La luchada se mantuvo muy reñida hasta casi el final, en
la que su poderoso puntal nos hizo temer en la derrota final.
Observar como doblegaba uno por uno a nuestros mejores puntales sin
que nada pudiésemos hacer para frenarle era francamente desolador.
Finalmente,
gracias a la inteligente y estudiada estrategia de nuestro técnico,
que supo marcar los tiempos y estudiar los puntos débiles del
contrario, conseguimos cansarle lo suficiente, ventaja que los
nuestros aprovecharon para doblegarles y que actualmente soñemos,
ahora si, con la victoria final. Por lo pronto su puntal yace en la
arena derrotado, aunque quedan un par de correosos luchadores de los
que no podemos confiarnos. Habrá que esperar a la última agarrada
para poder cantar victoria.
El
esfuerzo ha sido titánico pero ha merecido la pena. Gracias a todo
el equipo porque la victoria ha sido de todos, cada uno en su faceta.
Orgullo de equipo, orgullo de pueblo… Sobra decir que cuando
aunamos esfuerzos somos invencibles.
Gracias
a todo el personal profesional y voluntario que de una u otra forma
ha colaborado en la extinción del incendio de Gran Canaria. Gracias
de corazón.