domingo, 16 de octubre de 2022

Señales del alba, de vida y de libertad

 

*Colaboración escrita en el libro, ”Señales del alba” (2022), de Francisco González Tejera.


Recibir la llamada de Pako González invitándome a participar, a través de esta pequeña reseña en su nuevo libro (el quinto), fue toda una sorpresa. Prestar mi humilde colaboración en uno de estos homenajes de memoria histórica, del que seguro está siendo y será uno de los mayores documentalistas de la guerra civil española y su especial represión en Canarias, es todo un honor.

Es de quitarse el sombrero el que haya personas valientes como él, que lleve tantos años dedicados en cuerpo y alma a recuperar la memoria de los canarios desaparecidos en pozos, fosas, agujeros volcánicos y el mar de toda Canarias, con el único fin de devolverles su dignidad, a pesar de que las autoridades pasadas y presentes -de todas las Administraciones- se nieguen a facilitar la recuperación de sus cuerpos. Contrasta especialmente esta actitud negacionista de las autoridades canarias -salvo contadas excepciones- con lo acontecido en muchos lugares del territorio peninsular, en los que las autoridades locales se han volcado de forma respetuosa con la memoria y recuperación de las víctimas desaparecidas por la citada barbarie fascista. Crímenes todos ellos a los que les une la impunidad (hasta hoy), y a cuyos cuerpos se les niega el digno y merecido homenaje y respeto, como a cualquier ser humano. En Canarias comenzó el criminal y lamentable levantamiento fascista del 36 y parece ser que muchos están dispuestos a que que sea precisamente este territorio el último en recuperar la dignidad democrática y la decencia por estos cuerpos desaparecidos bajo una impunidad vergonzante, que aún sigue vigente a día de hoy.

Comprobamos además que, con el peligroso crecimiento de la extrema derecha y su nefasto blanqueamiento informativo, la democracia se tambalea peligrosamente sin que seamos plenamente conscientes de ello, expuesta como está a los torticeros intereses fanático-económicos de los herederos de aquellos crímenes fascistas.

El conocimiento de gran parte de lo acontecido en Canarias durante la guerra civil, los cuarenta años de dictadura, así como otros tantos de olvido histórico respecto a miles de crímenes, ha sido reflejado hasta ahora con precisión en los libros de Pako González, los que desde mi humilde opinión deberían figurar en las estanterías y el temario obligatorio de todos los colegios e institutos de Canarias. Es de sobra conocido que estamos condenados a repetir la historia que no sé conoce, por lo que deberíamos hacer “vacuna literaria” y memoria de nuestra triste historia como pueblo.

La guerra civil y los años posteriores, encubiertos con un grueso manto de la represión, el miedo y el olvido, fueron un lastre demasiado pesado de soportar. Sin embargo llama la atención que a día de hoy, cuando todos nos llenamos la boca de “falsa democracia”, sigamos ignorando la recuperación de miles de canarios masacrados y desaparecidos, a pesar de conocer perfectamente su ubicación. ¿Qué impide a nuestras autoridades solucionar, de una vez por todas, esta crueldad sobrevenida con las víctimas de aquella masacre? ¿Por qué extraña razón no ha sufrido aún nuestra sociedad una imprescindible desinfección del fascismo? Esta puede ser quizás la razón por la que de cuando en cuando esta lacra vuelve a hacer su aparición -como ahora- disfrazada de patriotismo barato.

Canarias tiene una asignatura pendiente con su pasado, que no es otra que la localización, extracción y homenaje a todas las víctimas que aún permanecen desaparecidos en pozos, fosas y agujeros volcánicos. Únicamente a partir de ahí empezaremos a reparar -en parte- las heridas de tanta atrocidad cometida en esta tierra, en la que hay que recordar además que no hubo enfrentamiento bélico.


viernes, 14 de octubre de 2022

Más que jefe fue un amigo, y lo sigue siendo

 Más que jefe fue un amigo, y lo sigue siendo. Hoy recordamos viejos tiempos hablando de lo divino y humano al borde de un café. Se me hizo corto, a pesar de que estuvimos más de dos horas. Llevábamos mucho tiempo sin vernos. Tendremos que aumentar la frecuencia de estos cafés, que la vida se nos va en un suspiro y merece la pena compartir con gente de ley. Es lo único que nos vamos a llevar...

Gracias Romero.



Carta a una hija, por Paco Vega

 

Desde que llegaste al mundo, hace ya algunos años, siempre supe que nos unía una conexión muy especial, más allá de la lógica paterno-filial. Recuerdo en aquellos lejanos años en el País Vasco, lugar en el que llegaste a la vida, casi siempre esperabas a mi llegada del trabajo para dormirte en mis brazos. Tu madre me decía nerviosa que no parabas de llorar, que no dormías y tampoco había forma de tranquilizarte. El caso es que nada más tomarte en brazos para tumbarme contigo sobre aquellos sillones que juntábamos a modo de sofá, sobre mi pecho te serenabas y te dormías plácidamente en apenas unos minutos. Tu madre casi se indignaba al comprobar tu comportamiento conmigo cuando entrabas en un plácido sueño de forma natural. Ver aquella carita disfrutar del más dulce de los sueños era para mi la mayor recompensa a una larga jornada laboral, con todos los duros condicionantes que en aquella época vivimos allí y que afortunadamente ya pasaron a la historia. Ahora miro hacia atrás y se me ponen los pelos de punta por mi “temeridad”. Yo tenía entonces veinticuatro años y tu madre veintitrés; dos niños apenas, comenzando a vivir, solos en aquel País Vasco de entonces; pero las circunstancias eran las que eran y había que seguir adelante, pero insisto, ahora me echo manos a la cabeza recordándolo.

Luego siguieron otros traslados y destinos, quizás demasiados. Yo me consolaba pensando que aquella experiencia de vida te haría mucho más fuerte de cara al futuro, perdiendo el miedo a viajar si algún día te veías en la necesidad de explorar otras tierras por motivos laborales.

Empezaste a hablar muy pronto, y con ello nos dejabas en evidencia a cada momento por tus indiscreciones. Las mujeres -especialmente- se acercaban a ti para hacerte las típicas carantoñas diciéndote lo guapa que eras y preguntándote por tu nombre, a lo que tu respondías con todo un alegato explicándole a todo el mundo cómo te llamabas, dónde habías nacido y a qué se dedicaba tu padre. La discreción no era tu fuerte… Apenas despegabas un par de palmos del suelo y ya eras una “escopeta dialéctica”. Siempre fuiste muy habladora.

El caso es que nuestra sintonía se fue afianzando con el paso de los años. Yo procuraba satisfacer, con atención y cariño aquella curiosidad innata que desde muy pequeña mostrabas por todo lo que te rodeaba; y claro está, atendías embelesada todas mis explicaciones sin pestañear. Una vez en Málaga -sentados en el viejo Seat Ronda- mientras esperábamos por tu madre me preguntaste: Papá, papá “¿Cómo funciona el motor del coche?” (tenías 3 o 4 años), a lo que yo te respondí de forma muy somera, acorde con tu edad. Pero poco satisfecha con la explicación insististe: si si, pero “¿cómo funciona por dentro?” Yo ahí me quise morir porque, a ver cómo le explicas a una niña de tres o cuatros años el funcionamiento de un motor. El caso es que tiré de todos mis recursos mentales y dialécticos para la difícil tarea de responder a una niña de tu edad a semejante pregunta. Menos mal que al menos conocía la teoría y por tu respuesta creo que te convencí. El caso es que al terminar mi explicación me dijiste: “papá ¿como sabes tú tantas cosas?”…

De vuelta a Canarias era muy gracioso escucharte hablar con aquel acento andaluz que habías adquirido en Málaga, como “esponja” que eras, mientras tus compañeros te escuchaban extrañados. Tres años a esas edades dan para mucho en un niño. Al poco ya lo habías perdido. Estoy seguro que de haber permanecido en el País Vasco hoy hablarías euskera con total normalidad.

Seguiste creciendo, estudiando y te aficionaste a la lectura como tu padre, hasta tal punto que hoy en día tu biblioteca duplica con creces la mía. Tuviste que superar la dolorosa separación de tus padres en plena adolescencia, con lo que eso significó, pero a pesar de todo, con mil obstáculos y otras tantas complicaciones te convertiste en la mujer que eres hoy en día, inteligente, luchadora e independiente; y no es pasión de padre. Una mujer que ha sabido reinventarse después de las múltiples zancadillas que te ha puesto la vida. Una mujer de la que estoy muy orgulloso y que hoy, estoy seguro, conseguirá todo lo que se proponga y más.

Y mientras tanto a tu padre se le seguirá cayendo la baba, como cuando eras un bebé, que siempre esperabas a dormirte sobre mi pecho al llegar a casa…

Tu padre que te quiere Tami.




De las capacidades y otras hierbas, por Paco Vega

 


Hoy, más que quejarme voy a lamentarme (sin citar a nadie). Lamentarme de la poca o nula
capacidad de empatizar -o capacidad a secas- que tienen determinados trabajadores, tanto en el sector público como en el privado. Aquí no podemos hacer distingos porque, aunque somos más dados a criticar al trabajador público (sea funcionario o no), el privado tampoco se libra de la “falta de cintura” que se le supone a todo aquel que trabaja de cara al ciudadano; y lo cierto es que las capacidades se tienen o no se tienen. A nadie se le esconde las dificultades de la atención al público, máxime cuando se trata de ciudadanos enfadados o disgustados con algún servicio (o ciudadanos difíciles, que todo hay que decirlo), pero la empresa o la administración debe cuidar sobre manera a este personal, asegurándose también de que los designados estén capacitados para tal fin, con los recursos empáticos suficientes para no agravar el problema en unos casos o crearlos -sin necesidad- en otros. A la empresa privada porque le va su prestigio en ello (y por consiguiente su beneficio), y la pública por el respeto hacia el ciudadano/contribuyente, que es a quien único se debe.

Y no hablo sólo desde lo personal, que alguien podría pensar que quizás soy yo el “mal amañao”, que lo soy; pero no, porque también he visto los malos modos y las contestaciones fuera de tono con otros ciudadanos en mesas aledañas de determinado organismo público.

Con treinta años trabajados en ambos sectores, veinte en la Administración y otros diez en la empresa privada, puedo decir que sé de lo que hablo y no sólo por experiencia, porque también lo viví en primera persona, entonces como parte activa y en los últimos años como “sufridor pasivo” de tantos egos, incapacidades y necedades. Los trabajadores porque no se puede dar lo que no se tiene, al margen de empatías, y los empresarios o “jefecillos” por evidenciar que les queda muy grandes determinadas responsabilidades.

Todos cometemos errores, yo el que más… A veces incluso voy disculpándome por ser humano y permitirme que la rabia me pueda en determinadas situaciones, pero el trabajador de atención al ciudadano, sea público o privado, debe ser consciente de su responsabilidad y profesionalidad. Debe saber que cuando ejerce sus funciones profesionales no es él y sus circunstancias, sino un servidor público, aunque no sea de lo público. Interiorizar que su prestigio y el de la empresa/departamento al que pertenezca están en juego.

Perdón por la dureza de algunos párrafos pero, “sólo Dios sabe” del esfuerzo y paciencia que en ocasiones debo tener -incluso con altos cargos- cuando me atropellan los despropósitos.
Quien se dé por aludido que tome nota; y quien no que piense que, las cosas son como son, pero debiéramos hacer lo posible para cambiarlas a “como quisiéramos que fueran”. Todo es susceptible de ser mejorado. En cualquier caso, decir que los egos son muy malos compañeros de viaje. Somos humanos, cometemos fallos de los que debemos aprender, y estaremos aprendiendo hasta el último minuto de nuestra existencia.

El niño de Montaña San Francisco, por Paco Vega

 Mi humilde homenaje escrito para uno de los más grandes que ha dado nuestro deporte -LA LUCHA CANARIA- con un inconfundible sello aborigen de fondo, nuestra cueva pintada de Gáldar.



jueves, 15 de septiembre de 2022

El niño de Montaña San Francisco (Loreto IV), por Paco Vega

 

Qué decir de Antonio González “Loreto IV” que no se haya dicho. Uno de los mejores luchadores de todos los tiempos, por poderío, habilidad, garra, e inteligencia. Si, inteligencia cinestésica que es la que manejan los deportistas de élite, los campeones. Todo lo que se diga de Loreto IV es poco. Sólo hay que sentarse a ver algunos vídeos de la época para comprobar su combatividad, flexibilidad y recursos luchísticos. Nunca se daba por vencido y siempre salía a luchar, aunque llevase una a su favor.

Ver los terreros llenos a rebosar para disfrutar de aquellos enfrentamientos históricos con lo más granado de nuestro deporte era muy emocionante (y aún lo sigue siendo durante el visionado de las luchadas que circulan por las redes). Volver a ver aquellas imágenes de agarradas en las que un hombre menudo, fibroso y tremendamente habilidoso, se batía con valentía para terminar dando en tierra con auténticos colosos de la lucha era algo digno de admiración. Los terreros se caían al suelo de emoción al vivir en directo las hazañas combativas de este GLADIADOR DE LOS TERREROS. Ver a más de seis mil personas vibrar en un recinto deportivo, con los enfrentamientos de estos colosos de la lucha, mientras otras mil se quedaban en la calle por falta de aforo era algo muy emocionante que nos gustaría volver a vivir en esta tierra canaria.


Loreto IV puso muy alto el listón de la lucha canaria en el Cruce de Arinaga, en Agüimes, en el Sureste, en la isla de Gran Canaria y en toda Canarias. No me imagino cómo debieron vivirlo esos hermanos “los loreto”, toda una saga de excelentes luchadores, cuando vieron progresar a uno de los pequeños de la familia hasta convertirse en "el hombre a batir” en los terreros de toda Canarias. Debía erizárseles la piel con lágrimas en los ojos cuando vivían los triunfos del pequeño de la familia que consiguió llegar a lo más alto de nuestro deporte.
Antonio González lo tenía todo: inteligencia, garra, grandeza, pundonor y combatividad. Todo lo que UN GRANDE de la lucha canaria necesita para llegar tan alto y mantenerse ahí por mucho tiempo, a pesar de tantas lesiones como sufrió.

No voy a nombrar en este texto a nadie más por dos razones fundamentales: porque este es un homenaje a Loreto IV y también porque no tendría espacio suficiente para enumerar a todos los luchadores que han hecho grande a este deporte, incluso mucho antes de que la televisión tuviera "la deferencia" de ocuparse de la lucha canaria, acercándola a todos los aficionados. A la mente de todos acudirán sin duda nombres insignes de la lucha; antes, durante y después de Loreto IV. No sólo hablo de puntales, porque no han sido pocos los luchadores de la mal llamada cola y media que destrozaron equipos enteros con actuaciones memorables.

Loreto IV nos ha hecho vibrar y amar a la lucha canaria como nadie y será por siempre memoria viva de nuestro deporte.

El próximo día 01 de octubre se celebra en el terrero de Vecindario una gran Luchada-homenaje a este monstruo de la lucha canaria. Se hace mención especial a que, en un bonito gesto de generosidad, el propio Antonio González ha decidido que todo lo recaudado se destine íntegramente a la Asociación de Lucha Contra el Cáncer Infantil Pequeño Valiente.

Gracias Antonio González por tantos días de gloria. Gracias Loreto IV por poner a nuestra lucha canaria en lo más alto del panorama deportivo canario. Gracias al niño de Montaña San Francisco que llegó a lo más alto de la lucha canaria. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS…


martes, 13 de septiembre de 2022

Emburrando que es gerundio, por Paco Vega.

 

Yo entiendo que la gestión pública municipal no debe ser nada fácil, al menos tan fácil como pudiera parecer desde fuera. Seguro que a veces es dura e ingrata porque, al margen de la propia gestión y sus contratiempos, las quejas o el reconocimiento público suele estar muy condicionado por varios factores. Los hay que aplauden al político con las orejas, haga lo que haga, bien por sintonía política o por peloteo (que hay que estar a bien con el que manda, por si acaso...). Y también los hay que lo critican todo, hagan lo que hagan, generalmente por escora política de signo contrario o por ignorancia, que de todo hay en la viña del señor…

Siempre lo he dicho, en público y en privado, que a la política se viene a servir, no a que te sirvan; con los pies bien pegados al suelo y posicionados (como en lucha canaria), para que no te tumben los unos -a la primera acometida- o para que el ego no te eleve por encima de los mortales con las adulaciones de los otros. Que hay que tener la cabeza fría y llena de ideas y los cajones repletos de proyectos, para cuando llegue el dinero poder ejecutarlos, priorizando necesidades y oportunidades. Hay que escuchar al pueblo y contrastar con los técnicos. Ni unos ni otros tienen siempre toda la razón. Ese y no otro debe ser el trabajo del político. Hay que trabajar velando por el buen funcionamiento de todo lo público, para el presente y el futuro del pueblo, sin olvidar a las viejas generaciones que lo dieron todo por nosotros. Un político tiene que saber escuchar a su pueblo, no como un Rey altanero sino como un servidor público que es.

Es de una tristeza desesperante comprobar como todos ven las necesidades de un pueblo, especialmente las de los barrios, menos los ediles municipales que por competencia les corresponde: abandonos, falta de mantenimiento y reivindicaciones vecinales mientras ellos siempre están ocupados “en cosas mayor trascendencia”. Eso si, a la hora de pagar impuestos no hay piedad. Impuestos que se abonarían con menos crítica si se observara la diligencia y competencia debidas. Insisto TODOS los empleos públicos son de SERVICIO, los políticos y los funcionariales; y como tales deben actuar y responder a las exigencias vecinales con la máxima diligencia. A veces se crean molestias y disgustos innecesarios entre la ciudadanía simplemente por falta de diligencia o concreción en la respuesta. Los vecinos normalmente suelen ser mucho más compresivos de lo que se les supone -salvo excepciones- siempre y cuando se les escuche y responda adecuadamente. El silencio suele ser un indicador nefasto ante las demandas vecinales y el principal enemigo de LA CONFIANZA.

Si, sé que no estoy diciendo nada nuevo, que son evidencias de una contundencia lógica y aplastante, que nadie debería verse obligado a ventilar determinados asuntos en medios de comunicación ni redes sociales, ni siquiera de andar de “romería” por el ayuntamiento mendigando la atención debida con los asuntos públicos, pero la realidad es muy triste y desesperante. A veces sólo es posible verla desde fuera del plenario.

Lo dicho, pónganse la ropa de brega y sude la camisa, que para algo está ahí, no sólo para pasear el palmito en procesiones. No de lugar a que empiece el año electoral para escuchar a los vecinos, aunque sólo sea porque no le quiten del cargo de un buen “sacón de camisa”. El día menos pensado le van a “emburrar” y va a acabar con el culo en la arena sin saber apenas ni por donde le ha venido.

PD. Que nadie se de por aludido, o si… 

El pregón del amigo Jesús, por Paco Vega

(28/08/2022)

Emocionante y vibrante pregón amigo Jesús Quesada. Se nota cuando se escribe y se habla con el corazón porque las lágrimas siempre estuvieron ahí, al borde de “rebosar” los ojos. Seguro que quienes te escucharon en vivo no pudieron evitar su aparición en más de una ocasión a pesar de la ternura y el cariño con el que te expresabas, o quizás precisamente por eso.


Apenas hablaste de ti, y precisamente eso dice mucho y muy bueno de ti. Tus compañeros, alumnos, el mismo pueblo de La Aldea y sus tradiciones fueron siempre los protagonistas de casi todo tu pregón. Te convertiste así en relator de vivencias y emociones pasadas en los centros educativos de La Aldea para los que no tuvimos la aventura de vivirlas.
Este pregón deja además a las claras, desde mi humilde opinión, el trabajo valioso de tantos profesores que han pasado por las aulas de La Aldea y de toda esta tierra canaria, artífices hoy en día de tan buenos profesionales de esta tierra. Nunca les estaremos suficientemente agradecidos.
Escuchando a Jesús Quesada se adivinan las lágrimas de emoción que debieron correr esa noche en La Aldea.
Qué contundente y reales sonaron algunas reflexiones en la voz de este hombre:
“Sin educación ni formación no hay futuro”
Si a mi me emocionó su pregón, no quiero ni imaginarme esos cientos de compañeros y alumnos que acudieron a escucharlo en directo.
Qué bien explicada y sentida “La Fiesta del Charco”, que hasta los que no somos aldeanos nos entran ganas de darnos un salto para vivirla.
Un pregón escrito desde el corazón en su totalidad.
PD. Merecía la pena hacer un pequeño paréntesis para aplaudir con unas líneas, en la figura de Jesús Quesada, la trayectoria de tantos profesores que marcaron el futuro de tantos alumnos.

https://www.infonortedigital.com/portada/sociedad/item/104541-el-pregonero-hizo-un-canto-de-amor-a-la-aldea?fbclid=IwAR1DlIinX1QaM2F1iUNVkYJf8gJmIwlAw0dWfscLS_nSRq1-1Ftyqo5Cy0I

domingo, 24 de julio de 2022

Cuando la progresía mediática da alas a la extrema derecha, por Pablo Echenique.

 

Cuando la progresía mediática da alas a la extrema derecha

Ante la posibilidad de que Podemos pudiera gobernar, medios supuestamente progresistas alimentaron el odio a los rojos. Esta práctica ha servido para dañar a algunos dirigentes del partido, pero también ha aupado a los ultras

Pablo Echenique 24/07/2022

La extrema derecha formalmente democrática, es decir, la extrema derecha que acepta someterse –al menos formalmente– a las reglas del juego democrático, es la última ratio del poder justo antes de la violencia física como forma de gobierno. Esto es, justo antes de la dictadura o, dicho de otra forma, justo antes de la institucionalización de la tortura y el asesinato como herramienta legítima del Estado para controlar a la población. Esto puede parecer una afirmación muy atrevida pero, si pensamos en lo que estaba ocurriendo en Italia y en Alemania justo antes de Mussolini y de Hitler, es fácil comprobar que se trata de una constante histórica. Y esa naturaleza inmediatamente previa a la violencia física permite, además, entender y explicar muy bien muchas de sus características visibles más notables, como su violencia verbal, su actitud matonil, los pectorales henchidos de gimnasio, el fetichismo casi lúbrico por las armas, la participación de históricos neonazis en sus manifestaciones y estructuras de partido o la proliferación de atentados terroristas de extrema derecha que estamos empezando a ver a lo largo del mundo desarrollado –muy especialmente en Estados Unidos– y que constituye la principal amenaza a la seguridad nacional en los países modernos. La palabra clave es violencia.

En términos de poder, es esa naturaleza de última ratio antes de la violencia física como forma de gobierno lo que caracteriza a la extrema derecha. En términos de discurso, lo que la caracteriza es el odio.

viernes, 22 de julio de 2022

¿En qué se parece una cebolla al fascismo? Por Paco Vega.

 


Descubrir el corazón y la motivación del fascismo es como pelar una cebolla. Empiezas quitando las cáscaras más superficiales: las de la devoción por la bandera, el amor a la patria (el país del que se trate, ya que son todas iguales en ese sentido), la unidad; los adoradores del ejército y las fuerzas de seguridad; el odio al diferente o al que se sale de la norma más pretérita de la secta (si, he dicho secta). Al tiempo que vas pelando la cebolla se te van saltando las lágrimas, muchas veces porque te vas dando cuenta de la gran mentira a medida que te acercas al corazón. Porque esa es otra, la inmensa mayoría de seguidores de “la cebolla” no se percatan nunca del gran engaño, o lo hacen cuando ya es demasiado tarde, conformándose por el camino y entre lágrimas con los restos de las sucesivas cáscaras que se van extrayendo o con simples palmaditas en la espalda. Y así hasta llegar al corazón de la cebolla, EL DINERO, al que por supuesto nunca llegan los facha-pobres. Si, el dinero está siempre detrás de ese montón de cáscaras cuya única misión es entretener a la inmensa mayoría de seguidores de la secta. Los beneficiados del sistema SON CUATRO que, única y exclusivamente ambicionan el dinero, acaparando todas las formas posibles de riqueza. Para ello necesitan tener EL PODER y EL CONTROL de todo (por eso siempre necesitan estar a bien con los uniformados, aunque la mayor parte de las veces se vaya todo en palmaditas de falsedad). Lógicamente no pueden llevar su verdadera intención escrita en la frente, puesto que necesitan de todas esas cáscaras para esconder sus verdaderas intenciones, al tiempo que se hacen acompañar -inocentes o no- de los “adoradores de cáscaras”, que les ayudarán a conseguir el preciado tesoro.

domingo, 17 de julio de 2022

Las buenas personas no necesitan disimular, por Paco Vega.-



A las buenas personas se les ve venir de lejos, son inconfundibles; al igual que a las malas personas, las interesadas, cargadas de odio, celos y de mentiras. L@s odiador@s nunca aportan nada bueno, por sentidos que puedan parecer sus argumentos en los diversos disfraces que adoptan para conseguir sus objetivos. Estas últimas son en realidad personas tremendamente egoístas que adoptan los discursos o silencios que más le convienen en cada momento. Se me ocurren muchos ejemplos de lo que digo en nuestro entorno cercano, pero seguro que también a una gran mayoría de los que me leen les ha venido a su mente muchos ejemplos de este tipo de personas, por lo que me puedo ahorrar dar más datos para señalar su mezquidad y pequeñez humana.

Como dice el refrán “obras son amores y no buenas razones”.

Al resto sólo desearles que sean felices y que sigan adelante con sus vidas, haciéndose acompañar de las personas de buen corazón e ignorando a los mediocres, a los que nos vemos obligados a soportar como “daño colateral”...


lunes, 11 de julio de 2022

De Victoria Prego a Ferreras: cuatro décadas de gabinetes de prensa del poder, por Gerardo Tecé

 


Que en España el periodismo no vigile a los poderosos, sino que les haga de matón a sueldo, es tanto como decir que en España no hay democracia

Durante una interrupción en una entrevista realizada en 1995, el expresidente Adolfo Suárez le confesó a Victoria Prego que si en España tenemos monarquía es porque él la metió con calzador en la Constitución del 78. Según las encuestas que manejaban por aquel entonces, le susurraba con complicidad Suárez a Prego tapándose el micro, lo más probable hubiese sido que ganase la opción de la república si se les hubiera preguntado a los españoles. Así que se decidió que lo mejor era no preguntarles. Un secreto de Estado tan brutal, tan impactante, que compartirlo con una periodista como hizo Suárez parecería la peor idea del mundo. En otros lugares del mundo. No en España. Décadas más tarde le preguntaron a Victoria Prego por aquella confesión que le hizo Suárez y la periodista, lejos de sentirse incómoda por la evidente dejación de funciones, por su abandono del oficio de periodista –controlar al poder y contar sus triquiñuelas–, risueña, respondió dándole la razón al expresidente: claro, hizo muy bien, porque no salían los números. Hay pocos periodistas en España tan premiados como Victoria Prego. El día que falte, los obituarios rezarán que fue la periodista fundamental de la Transición. Y no les faltará razón. No en un país que decidió que, en democracia, el papel del periodismo no sería fiscalizar a los poderosos, sino trabajar para ellos como gabinete de prensa. Todo sea por la estabilidad.

lunes, 27 de junio de 2022

No preguntes, la culpa es de los muertos.

 No preguntes, la culpa es de los muertos.



No preguntes cuántos son los que murieron, tampoco cuántos han sido los heridos. “Centenares”, dicen. Cien arriba, cien abajo, ¿a quién importa?

No preguntes cómo murieron. No preguntes si esas muertes fueron evitables. No preguntes por responsabilidades en ese crimen contra unos jóvenes africanos sin derechos y sin pan.

No preguntes.

La culpa es de los muertos. Los violentos son los muertos. Los responsables son los muertos. Las autoridades de los pueblos solo pueden felicitarse de haber conseguido que los violentos estén muertos, que los sin derechos estén muertos, que los sin pan estén muertos.

Y se felicitan, y se aplauden, y se animan a continuar matando a jóvenes africanos sin derechos y sin pan.

Y el periodismo calla: no denuncia; ni siquiera informa.

Y la conciencia calla: como si Alá bendijese a quienes matan pobres; como si a Dios no importasen los pobres que asesinamos; como si los dueños del poder que nos oprime fuesen también los dueños de nuestros derechos, de nuestro pan, de nuestras vidas.

Yo no puedo decir que los responsables de esas muertes son los Gobiernos de España y Marruecos; yo no puedo decir que los Gobiernos de España y Marruecos tienen las manos manchadas de sangre; yo no puedo decir que los Gobiernos de España y Marruecos llenan de víctimas un frío, cruel, prolongado e inicuo corredor de la muerte. No lo puedo decir, pero lo puedo pensar, y es lo que pienso.

Adoradores del dinero a un lado y otro de la frontera. Adoradores del poder a un lado y otro de la frontera.

Adoradores de la mentira a un lado y otro de la frontera. Violadores de pobres a un lado y otro de la frontera. Herodes y Pilato se han puesto de acuerdo para matar a Jesús. A un lado y otro de la frontera Herodes y Pilato se han puesto de acuerdo para matar a ese “Dios para Dios”, que son los pobres.

•••

Santiago Agrelo, arzobispo emérito de Tánger.





viernes, 24 de junio de 2022

UCRANIA: ¿CÓMO HEMOS LLEGADO A ESTA SITUACIÓN?

UCRANIA: ¿CÓMO HEMOS LLEGADO A ESTA SITUACIÓN?

(una conferencia para los que quieren saber la verdad de las cosas).
José Antonio Zorrilla fue diplomático y cónsul general de España en Milán, Shanghái y Moscú, así como embajador para Georgia y Estados del Cáucaso. Zorrilla, que condena sin paliativos el poder destructivo de Putin, se sale del discurso oficial para certificar que Occidente no ha hecho sus deberes con respecto a Rusia y que ampliar la OTAN sin consenso es un «gravísimo error» con consecuencias.

jueves, 12 de mayo de 2022

ABRAZOS BAÑADOS EN VINO, por Paco Vega.

 ABRAZOS BAÑADOS EN VINO, por Paco Vega.



Todos, sin excepción, avanzamos por la vida con nuestras pequeñas o grandes batallas personales, con nuestras luchas internas y contradicciones. Por todo ello se hace imprescindible parar en algún rincón de camino, cada cierto tiempo, y tomar resuello. Estos paréntesis de vida nos deben servir para aparcar el estrés de obligaciones y autoexigencias. Por lo tanto, sin olvidar que «la vida es aquello que nos sucede mientras hacemos planes de futuro», hagamos paradas -cada vez más frecuentes a medida que avanzan los años- para tomar el pulso a nuestras alocadas vidas, dándonos esos «abrazos bañados en vino» tan necesarios para el equilibrio de nuestra mente y nuestro cuerpo.

Gracias a mis amig@s de abrazos y vinos que, en ocasiones, me dan estos pellizcos de reflexión para reflejar en un pequeño texto lo que todos sabemos pero que a veces olvidamos.

Sigamos pues riendo, abrazándonos y brindando mientras dure esta botella llamada VIDA.

lunes, 25 de abril de 2022

La Guardia Civil militar: un obstáculo para la solución de múltiples problemas, por Paco Vega.



Quizás está más cerca de lo que pensamos el que determinados policías entiendan, más allá de prejuicios y clichés, que «la izquierda verdadera» es la única que va a ocuparse de que puedan alcanzar unas condiciones económicas y de vida dignas, de que el dinero que el Estado invierte en medios materiales llegue efectivamente a las Unidades para las que fue destinado. Quizás algún día la mayor parte de los agentes comprendan que determinados partidos sólo buscan de ellos el voto. De ahí las palmaditas y las fotos, pero nada más. Quizás algún día la inmensa mayoría entienda que los himnos y las banderas sólo son “el folclore” que determinados políticos y partidos utilizan para ocultar la falta de inversiones y recursos en seguridad, en investigación y dotacionales. Quizás a determinadas ideologías políticas no interesan una democratización real de la policía por razones más que evidentes, lo estamos viendo cada día. La realidad policial está en la dignificación de la profesión y la democratización de los Cuerpos. Es inconcebible, por ejemplo, una Guardia Civil con carácter militar en el siglo XXI.

Cierto, hay cuerpos de policías franceses, italianos y de algún que otro país, que conservan un carácter militar. Siempre se nos ha puesto como ejemplo para que nos traguemos esa incoherencia, aunque las competencias militares sean “cero”. La Policía Nacional -ahora Cuerpo Nacional de Policía- fue también militar, pero al comienzo del periodo democrático de este país se estimó conveniente desmilitarizar el Cuerpo. Sin embargo la Guardia Civil sigue cargando con ese antidemocráticoSan Benito”, lo que ha servido para justificar infinidad de injusticias laborales, disciplinarias y de recortes de todo tipo. Nunca nadie explicó la razón lógica por la que un cuerpo policial como la Guardia Civil debía conservar ese anacrónico e injustificado carácter militar. Esta es quizás la principal reivindicación en este cuerpo policial, desplazada ahora por la excesiva escora hacia las derechas y sus asociaciones afines. Los desinformados uniformados aceptan con demasiada frecuencia y con incauta inocencia determinados eslóganes patrióticos, vacíos de contenido, en lugar de reivindicar la seguridad pública, su presente laboral y su futuro profesional. Desconozco las motivaciones por las que existen cuerpos policiales de carácter militar en determinados países, pero si les soy sincero tampoco me preocupa.

El principal problema es que hemos asimilado la existencia de los cuerpos policiales militares en algunos países europeos, y esto -de alguna forma- nos ha hecho normalizar este sinsentido en España. Pues no es cierto, ha sido siempre un engaño.

Yo no quería centrarme aquí porque es hacer el juego a la insensatez. No tiene justificación alguna, nunca la ha tenido, pero había que decirlo y se dijo. Las facetas y misiones policiales están bien definidas y muy alejadas del ejército y de las funciones militares.

Procuro estar al tanto de toda la problemática que envuelve al colectivo profesional al que pertenecí durante 22 años, de lo cual me siento orgulloso, pero no por ello tragaré con las ruedas de molino con las que siempre nos han querido hacer comulgar. Lamento que este Gobierno tampoco haya caminado en la senda de la desmilitarización y que hasta la Asociación más veterana de la Guardia Civil (La AUGC), se haya olvidado de esta reivindicación, con postulados en ocasiones más bien erráticos. Sólo hay que parar un momento y echar la vista atrás para comprobar lo que digo.

En fin, no pensé que a día de hoy hubiese que hacer un alegato completo de reivindicaciones referidas a formación, ascensos, destinos, vehículos, armamento, riesgos laborales, etc. Eso le toca a las asociaciones, si es que no han terminado de perder el norte. Y muchas más cosas que no menciono por no extenderme en exceso pero, si echamos mano a la historia y a las tradiciones, en lugar de la modernidad, efectividad y calidad de vida de los agentes, volveremos al barboquejo y al corchete (los más antiguos me entenderán).

Perteneciendo al mismo ministerio no se entiende que haya tantas diferencias económicas y de todo tipo. Otra razón de más para desconocer el sentido de una vinculación estéril con el Ministerio de defensa, con quien no le une absolutamente nada. Considero más bien que siempre ha sido una especie de bozal para el Cuerpo.

Pero ya adelanto que no me considero de vuelta de nada, me considero un aprendiz permanente de casi todo, aunque tenga serias y argumentadas razones a todo lo que expreso.

Sobre el tema de apoyar o no a los compañeros sólo decir que depende de la materia, el "corporativismo vacío" es un vicio que detesto, pero cuando tienen razón doy palabra y espacio para las reivindicaciones. Lo he hecho incluso con otros cuerpos policiales. En el “a por ellos” no me van a encontrar nunca. Tampoco en reivindicaciones vacuas de patrias y banderas, pero si en las justas reivindicaciones laborales, profesionales y democráticas.

Quizás la solución definitiva estaría en la unificación de ambos cuerpos policiales. Otro caballo de batalla, quizás el definitivo, ya que la policía no volvería a ser militar ni a punta de pistola (nunca mejor dicho). Y además redundaría en un ahorro económico real por el evidente recorte en duplicidades de todo tipo vigentes en la actualidad.

Echo en falta una ITV democrática de la policía española por todo lo que estamos conociendo ahora, y esta UNIFICACIÓN POLICIAL podría ser -sin duda- “la prueba del algodón” definitiva.