¡Qué bueno lo de Uruguay! El senado ha aprobado la creación de un mercado legal de marihuana que regulará la producción y distribución de la sustancia y....no se lo pierdan....¡a un dólar el gramo! Está claro que se está imponiendo el sentido común, y no me refiero sólo al precio. Hablo de ver por fin lo que ha estado siempre ante nuestras narices, de concederle a la lógica una victoria, de rendirse a la tolerancia....y hablo en sentido planetario, eso sí, excluyendo a España.
Excluyo a España del planeta porque está más que demostrado que España no es de este mundo. En España no vamos a ver titulares así porque....si lo supiera, que lo sé, no tendría un blog de mierda en un ordenador del paleolítico, así que mejor dejar para otro lugar la pataleta.
Volviendo a la marihuana, quiero recordar que es una planta. Uno COMPRA (que esa es otra) las semillas, las pone el la tierra, las riega, las abona, y después de unos ocho meses, recoge la cosecha (si algún listillo no te la ha robado antes). Que alguien me diga donde está lo malo de todo esto.
Yo no voy a hacer apología de nada, no me va lo de crear conciencia, pero sí voy a defender mi derecho a gestionar mi propia vida como me de la gana. YNo olvidemos que, afortunadamente, no es necesario “fumar” para consumir marihuana, así es que, estirando el argumento, la tila, que también tiene efectos calmantes sobre el organismo, ¿no debería prohibirse? Y ¿qué pasa con la manzanilla, que también afecta de tal modo al estómago que provoca su distensión? ¿no deberíamos comprarla en el mercado negro? ¿Y el café? Buf! Droga dura, sin duda.
Y ahí está el tabaco. La lista de sustancias que contiene es casi infinita, cuando por lógica debería ser sólo tabaco. Y no sólo eso, contiene sustancias cuyo único objetivo es, como el clítoris, generar dependencia; ¡su único objetivo!....¡y resulta que es legal! es tan legal que ni siquiera el gobierno sabe a ciencia cierta cuales son todos sus componentes....¡de locos!
A pesar de todo, creo que la gente es cada vez más tolerante con los fumadores de cannabis, que antes eramos considerados unos pobres desgraciaos. Y esto tiene mucho que ver con el hecho de que cada día se descubren nuevos efectos beneficiosos del cannabis sobre el desarrollo de distintas enfermedades, no únicamente como sustancia paliativa del dolor. Los múltiples beneficios de esa planta son ya una certeza científica, pero como en todo, siempre hay quien decide ignorar la evidencia y continuar con la cruzada.
Somos drogadictos porque tomamos sustancias que nos enganchan, pero tanto como lo son los que consumen alcohol (y que conste que aquí se incluye también a los que "toman vino" -porque no te atrevas a decir que "consumen" si no quieres ser tildado de extremo), los que fuman tabaco, los que se atiborran de café, los que no pueden vivir sin comer bollos, los que cenan siempre chocolate... La idea es básica. No digo que fumar hierba sea bueno, sólo reclamo mi derecho a disfrutar de la misma libertad que los drogadictos legales.
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