Un ejemplo más de que "cuando se quiere se puede". Este es sólo un ejemplo de los servicios que podrían mancomunarse para optimizar recursos.
San Bartolomé de Tirajana, Santa Brígida, Valsequillo, San Mateo y Tejeda comparten la atención a víctimas de la violencia de género con un proyecto piloto único en la Isla mediante el que diez profesionales contratados por la Mancomunidad de Medianías prestan un servicio integral a mujeres e hijos.
En vez de por separado, cada uno en su oficina de atención a víctimas de la violencia machista y con medios humanos insuficientes, los cinco municipios de la Mancomunidad de Medianías han decidido compartir esta prestación para dar un servicio integral a las mujeres afectadas y a sus hijos. Sólo en el año 2012 se contabilizaron 258 víctimas en las oficinas de la comarca, en la que se han previsto dos extensiones, una en la sede de la Mancomunidad, en la Vega de San Mateo, y otra que abrirá próximamente en San Fernando de Maspalomas.
El primer servicio comarcal de la Isla para atención a víctimas de la violencia de género es una experiencia piloto para seis meses que el consejero de Política Social del Cabildo, José Miguel Álamo, espera «que tenga continuidad para crear redes estables» y está convencido de que esta fórmula «será la tendencia a seguir» por el resto de municipios grancanarios.
La directora del Instituto Canario de Igualdad, Elena Máñez, recordó que en 2013 ya son dos mujeres y un menor las personas que han fallecido por violencia machista en Canarias. Hasta el mes de agosto fueron 8.715 las llamadas al teléfono 112, de las que el 26% (2.213) eran de «emergencia» por peligrar la integridad de mujeres o menores. «Esas cifras son la punta del iceberg», apuntó, instando a todas las víctimas a acudir a cualquiera de los 70 servicios especializados que existen en Canarias. También reconoció que en los medios rurales hay más temor para denunciar la violencia machista que en las ciudades.
El alcalde de San Mateo, Antonio Ortega, subrayó que con el nuevo modelo comarcal «la movilidad correrá a cargo de los trabajadores y no de las víctimas». Según dijo, mancomunar el servicio permite «maximizar los recursos». Asimismo, destacó que la atención integral incluye a los hijos de las mujeres víctimas de la violencia machista.
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